Según estima la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) la economía de la Comunitat Valenciana avanzó en el segundo trimestre de 2024 un 0,7 % en tasa trimestral y un 2,8 % en tasa anual. Este avance es superior al esperado, pero supone un punto de inflexión con respecto a la trayectoria anterior y el inicio de una etapa de suave ralentización de la economía valenciana.
Tanto en tasa trimestral como anual el crecimiento es ligeramente inferior al del conjunto de la economía española, y contrasta con la atonía generalizada que todavía impera en las principales economías de la Unión Europea. De confirmarse estos datos, la economía de la Comunitat estaría creciendo a una tasa anualizada del 2,9%; tres décimas por debajo de la media nacional.
Así se recoge en el Informe de Coyuntura y Perspectivas Económicas del segundo trimestre de 2024 de la Confederación Empresarial de la Comunitat Valenciana (CEV), que señala que la economía regional continuará avanzando con dinamismo en los próximos trimestres, aunque a tasas menos elevadas, y podría alcanzar en el conjunto del año un crecimiento agregado próximo al 2,7 %. Este crecimiento no será homogéneo entre los sectores y sus ramas productivas, pero en su conjunto permitirá seguir generando empleo y reducir el paro.
De hecho, se prevé, desde el punto de vista de la demanda, que las mejores condiciones de financiación impulsen avances en el consumo privado y en la inversión que, además, también se verá favorecida por un mayor despliegue de los fondos NextGeneration. El alargamiento que se está observando en la temporada turística favorecerá la parte de la demanda externa en servicios, pero la de bienes todavía se resentirá por la prolongada atonía de los principales mercados de destino. Con todo, la demanda externa contribuirá positivamente al crecimiento económico.
Por el lado de la oferta preocupa la situación estructural y el momento coyuntural por el que está atravesando el sector primario, tanto en la rama agrícola como en la ganadera. También preocupa la situación de algunas ramas manufactureras. En particular la del sector automotriz, cuyos efectos indirectos e inducidos sobre otras ramas y actividades están muy concentradas geográficamente. Otras ramas tradicionales, como la “textil” y la del “cuero y calzado” están mostrando una situación adversa y ratios peores que sus medias nacionales. Por el contrario, ramas tan potentes como las relacionadas con el turismo, las TIC y las audiovisuales están consolidando un excelente desempeño y una trayectoria incluso más dinámica que la media nacional. También la construcción está consolidando una ligera mejoría. Serán éstas las ramas que continuarán impulsando la economía regional.
Perspectivas de futuro
De cara al futuro se puede inferir que la economía regional está manteniendo durante el tercer trimestre de 2024 un ritmo de crecimiento notable, aunque inferior al del trimestre anterior, y con un alto grado de heterogeneidad entre las ramas productivas.
Tal y como se destaca en el informe, las empresas se siguen enfrentado a un aumento en los costes laborales y a elevados niveles de precio en las materias primas. Todas las ramas productivas están teniendo dificultades para encontrar personal cualificado, lo que supone un elemento distorsionante añadido tanto para la actividad como para la productividad. Además, muchas ramas sometidas a la competencia exterior están sufriendo las consecuencias de un exceso regulatorio, sobre todo el relacionado con la normativa comunitaria. Los elevados costes asociados a esta normativa, así como la falta de cumplimiento por parte de países terceros, está mermando competitividad de nuestras empresas.
A la vista de esta realidad y de los retos a los que se enfrenta la economía de la Comunitat Valenciana, desde la CEV se subraya la necesidad de mantener un clima favorable a la actividad empresarial y la inversión, que favorezca avances en la productividad y la competitividad empresarial valenciana. Para ello, además del esfuerzo que seguirá realizando el tejido empresarial, es necesario que desde los distintos niveles de la Administración se preste un apoyo decidido a determinados sectores y ramas productivas, como el sector primario y el automotriz, que están atravesando profundos cambios estructurales y una coyuntura particularmente adversa.
A nivel regional este apoyo no es posible si el Sistema de Financiación Autonómica no aporta los recursos necesarios para, además de proveer de unos servicios públicos de calidad a la ciudadanía, adoptar medidas de política económica en apoyo a estos sectores. Por ello, desde la CEV se insiste en el necesario cambio del Sistema de Financiación Autonómica, y en que la reforma debe ser pactada de forma multilateral e incluir la aplicación de un fondo de nivelación transitorio, así como la condonación de aquella parte la deuda de la Generalitat que ha provocado el caducado sistema de financiación.
