Recibos de viviendas de más de 300€ y de bajos de 900€. El Ayuntamiento de Paiporta ha cobrado el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) a vecinos cuyas viviendas y bajos comerciales quedaron arrasados por la DANA del pasado 29 de octubre. La medida ha generado indignación porque el consistorio, semanas atrás, anunció públicamente un plan de alivio fiscal para la ciudadanía afectada.
Lo que anunció el Ayuntamiento
El 1 de abril, el gobierno municipal hizo público que hasta el 31 de diciembre de 2025 quedarían exentas varias tasas municipales con el objetivo de “rebajar la presión fiscal y aliviar la carga económica de la ciudadanía tras la DANA”.
Las tasas exentas incluían los vados, las licencias urbanísticas por obras de reconstrucción, la ocupación de vía pública de bares y restaurantes con terraza. Además, los puestos del mercado y mercadillo. La entonces alcaldesa, Maribel Albalat, destacó entonces que se trataba de una medida “para facilitar la recuperación en un momento complicado”.
Sin embargo, en esa batería de decisiones no se incluyó el IBI, el impuesto de mayor peso en la economía de los hogares afectados.
El calewndario del contribuyente y el cobro del IBI
Según el calendario oficial del contribuyente, el periodo voluntario de pago del IBI urbano estaba fijado entre el 1 de junio y el 1 de agosto de 2025. Los recibos domiciliados fueron cargados en las cuentas bancarias durante ese plazo. Además, aquellos vecinos que habían solicitado el pago fraccionado llevan abonándolo desde el mes de mayo, en cuotas mensuales hasta octubre.
Esto implica que familias que todavía no han podido regresar a sus viviendas, o que están afrontando costosas obras de reparación, han tenido que seguir pagando íntegramente el impuesto municipal sobre esos inmuebles.
Malestar entre los vecinos afectados
Los damnificados critican que el consistorio no haya aplicado medidas específicas sobre el IBI, a pesar de que se trata del recibo más elevado. “Nos prometieron rebajar la presión fiscal y lo único que han hecho es quitarnos tasas menores. El recibo más grande, el IBI, nos lo han pasado igual”, lamenta un vecino afectado.
El cobro del IBI ha puesto en entredicho el alcance real de las medidas anunciadas. Las exenciones aprobadas afectan a tasas secundarias en comparación con el impacto económico del principal impuesto municipal.
Debate abierto en la localidad
El contraste entre lo anunciado en materia fiscal y lo finalmente ejecutado ha reavivado el debate sobre el apoyo institucional a las familias y negocios de Paiporta. En particular, aquellos que continúan luchando por recuperarse de los efectos de la DANA. Mientras algunos consideran que las exenciones aprobadas son insuficientes, otros reclaman medidas de mayor calado. Estas medidas deberían incluir directamente el IBI para las viviendas y locales dañados.
