El Ministerio de Industria y Turismo ha activado una nueva convocatoria del Perte VEC IV para proyectos de inversión en la cadena de valor industrial del vehículo eléctrico y conectado, dotada con 400 millones de euros.
El paquete combina 250 millones en préstamos reembolsables y 150 millones en subvenciones directas, orientados a sistemas, subsistemas, componentes y ciertas infraestructuras auxiliares que facilitan el despliegue del vehículo eléctrico.
Plazos, condiciones y gestión
Las solicitudes podrán presentarse entre el 14 de octubre de 2025 a las 10 horas y el 24 de octubre de 2025 a las 14 horas. Los préstamos tendrán un tipo fijo del 2,844%, con 10 años de amortización y 3 de carencia. Estas condiciones ofrecen previsibilidad financiera y margen de tesorería para acometer inversiones industriales, mientras que la ventana de presentación, limitada a diez días, exige proyectos maduros y listos para su ejecución.
Esta línea se suma a la de baterías dentro de la cuarta convocatoria del Perte VEC, dotada en total con 1.250 millones y gestionada íntegramente por Sepides. Según la evolución de la demanda de ayudas, el resto del presupuesto se irá convocando en fases sucesivas.
El Ministerio anima a las empresas de la cadena de valor a concurrir a esta sección del Perte VEC IV con el objetivo de acelerar inversiones y reforzar capacidades productivas en torno al vehículo eléctrico. La prioridad declarada es que los fondos se agoten, como indicador de tracción real sobre el tejido industrial.
El anuncio se realizó durante una visita a unas instalaciones de Seat y Cupra en Sedaví que quedaron inundadas por la DANA del 29 de octubre del año pasado, con la intención de subrayar el apoyo a la recuperación y a la modernización del ecosistema de automoción.
Ford en Valencia
En paralelo, el titular de Industria aludió a la situación de Ford en Valencia: la compañía está acogida al mecanismo Red para formar a la plantilla en nuevas tecnologías y, durante 2025 y 2026, desarrolla un proyecto de transformación y preparación para la producción de nuevos modelos.
A partir de 2027, el plan pasa por iniciar en Valencia un nuevo modelo, una hoja de ruta con la que se sostiene que en Almussafes hay futuro y que contará con el acompañamiento público previsto en dicho mecanismo.






