Jan Choinski se proclamó campeón de la Copa Faulcombridge tras remontar a Luka Mikrut por 4-6, 6-1 y 6-2 en la pista del Club de Tenis Valencia. El británico ajustó el plan después de ceder el primer set y acabó imponiéndose con autoridad. Finalmente, cerró el título en su primera bola de partido.
Jornada comprimida y doble esfuerzo
La lluvia del día anterior obligó a disputar por la mañana las semifinales individuales y la final de dobles. Choinski accedió al último partido tras superar a Henri Squire en una semifinal reanudada con 5-5 en el segundo set. Este terminó 6-7, 7-5 y 7-5. Mikrut, por su parte, jugó su semifinal completa. Se impuso con claridad al valenciano Carlos Taberner por 7-6 y 6-0. En dobles, el título fue para los brasileños Marcelo Demoliner y Orlando Luz, vencedores ante Íñigo Cervantes y Daniel Cukierman por 6-3, 3-6 y 10-5.
El calendario condensado elevó la exigencia física y mental. Con dos partidos en el mismo día, la gestión del desgaste y los cambios de ritmo se volvieron decisivos. Especialmente, cuando el encuentro se alargó a un tercer set.
Mikrut arrancó con más filo, generó tres bolas de rotura y se llevó el primer break en el quinto juego. Con confianza, sostuvo su servicio y cerró el 4-6 apoyado en derechas ganadoras y un saque abierto que le dio ventaja en los puntos clave.
El guion cambió por completo en la segunda manga. Choinski, más fresco en los intercambios largos, salvó cuatro opciones de quiebre. A partir de ahí tomó el mando: dominó con su primer servicio, subió con decisión a la red y neutralizó los tiros profundos de su rival para firmar un 6-1 casi perfecto.
En el set definitivo, el británico mantuvo la inercia. Tras asegurar su primer turno, rompió de inmediato el servicio de Mikrut y fue ampliando la brecha con solvencia. El momento clave llegó en el séptimo juego. El 5-2 nació de un nuevo quiebre en el que al croata comenzaron a fallarle las piernas y la precisión. Con todo a favor, Choinski sirvió para campeón y cerró el duelo con un remate contundente en la red.
Lecturas del título para ambos
Para Choinski, de 29 años y 158 del ranking, la victoria en un Challenger 125 supone un impulso de confianza. Además, son puntos valiosos para consolidar su posición. Para Mikrut, de 21 años y 239 del mundo, la semana deja una final y señales de crecimiento. Mostró golpes de alto nivel y competitividad, pese al desgaste acumulado.
