Una manifestación el 29 de noviembre en València pedirá el enjuiciamiento del president de la Generalitat en funciones, Carlos Mazón, y reclamará la reconstrucción social de la Comunitat Valenciana tras la DANA. La convocatoria surge de una reunión de organizaciones sociales y entidades cívicas, que han debatido el alcance de la catástrofe y han acordado un calendario de movilización para mantener el foco en la respuesta institucional.
Estas entidades también han aprobado concentraciones el 11 y el 17 de noviembre, fechas que coinciden con la declaración de Mazón en Les Corts y en el Congreso, respectivamente. La elección de estos días busca visibilizar las demandas cuando el president rinda cuentas ante las cámaras, subrayando la relación entre la gestión del Consell y las consecuencias inmediatas de la DANA.
Según Toni Valero, miembro de la comisión de enlace del Acord Social, en la reunión se ha puesto de manifiesto que ‘continúa la lucha para exigir el enjuiciamiento de Mazón y de su consell por las responsabilidades que penales que puedan tener’ y que la movilización sigue orientada a ‘lograr la reconstrucción social y contra las políticas del Gobierno del PP y de Vox‘. Con este planteamiento, el movimiento pretende convertir la indignación ciudadana en una agenda concreta de medidas y control político.
Campaña de olivos y participación local
Las entidades impulsarán además una campaña en municipios y comarcas de la Comunitat Valenciana con la plantación de olivos ‘en memoria de las personas asesinadas el 29 de octubre, por los voluntarios que entraron en los pueblos anegados para salvar vidas y en recuerdo del pueblo palestino que está sufriendo un genocidio‘. Esta acción busca un gesto de duelo público y solidaridad que conecte el impacto local de la DANA con una causa humanitaria que consideran afín.
‘El olivo es un símbolo de la solidaridad‘, ha señalado Valero, quien ha detallado que en cada acto se presentará el Acord Social Valenciano, se fijarán los puntos que consideran ‘lo más importante‘ para la reconstrucción y se recogerán propuestas que nazcan de los pueblos y comarcas. La implicación de la ciudadanía en ese proceso pretende alimentar un programa de recuperación con prioridades consensuadas desde el territorio.
Con este itinerario, las organizaciones aspiran a llegar al 29 de noviembre con un mensaje unificado: exigir responsabilidades por la gestión política y acelerar la reconstrucción social. La marcha en València se perfila como el principal hito de una movilización que combina presión institucional, memoria colectiva y participación vecinal.






