Una de las acusaciones particulares personadas en la causa penal por la gestión de la DANA ha solicitado a la instructora que cite a declarar, en calidad de testigos, a los escoltas y chófer que sirvieron el 29 de octubre de 2024 a Carlos Mazón, así como a los bedeles o personal de control de accesos del Palau de la Generalitat aquella jornada.
El letrado Ximo Esteve, autor de esta solicitud, a la que ha tenido acceso EFE, considera que sus testimonios pueden ser útiles respecto a la «cronología, ubicación y comunicaciones mantenidas por Carlos Mazón y Salomé Pradas, así como otras personas relevantes para la investigación, como pueda ser Juanfran Pérez Llorca, citado a declarar el próximo viernes».
Declaración Maribel Vilaplana
Esta petición se justifica en las recientes revelaciones, apuntadas por la periodista Maribel Vilaplana en su declaración en el juzgado, y por el propio Mazón en el Congreso, de que los escoltas no le acompañaron a la salida del restaurante tras la comida.
Además, cita Esteve el pronunciamiento de la Sección Segunda de la Audiencia Provincial que autorizó la declaración de Vilaplana.
«Forman parte de la instrucción las actuaciones dirigidas a averiguar la incidencia que pudo tener la omisión o traslado tardío de información en decisiones erróneas o en la omisión de decisiones debidas, las cuales podrían haber evitado los graves daños personales investigados».
Escoltas
Por ello, cree que los escoltas pueden ofrecer información relativa a las conversaciones telefónicas de Mazón, si fueron liberados del servicio por él mismo, su estancia en el restaurante, posible inquietud del president por lo que sucedía o el acompañamiento al Centro de Emergencias de l’Eliana.
Chófer y bedeles del Palau
Por lo que respecta al chófer y bedeles del Palau, esta parte considera que su testimonio es «indispensable» para reconstruir «de manera precisa lo que sucedió aquella jornada».
«La citación de los agentes de seguridad o escoltas, del o los chóferes del vehículo oficial, y del personal de vigilancia del Palau de la Generalitat constituye no solo una diligencia lógica y coherente con la investigación, sino estrictamente necesaria para esclarecer hechos clave: la ubicación, desplazamientos, comunicaciones, acompañamiento y conducta de Carlos Mazón, así como para contrastar las declaraciones ya prestadas por Maribel Vilaplana y Marco Presa (asesor de Pradas)», concluye el referido escrito.






