Valenciaport y el Ayuntamiento de Gandia impulsan una reurbanización de 24.987 m2 para abrir el Puerto de Gandia a la ciudad. El objetivo es eliminar las barreras físicas que lo separan del casco urbano.
La actuación, financiada por Valenciaport, cuenta con un presupuesto base de licitación de más de 6,8 millones de euros (8,2 millones con IVA). Este plan saldrá a concurso en breve.
El objetivo es transformar el entorno de los tinglados fruteros. También busca cambiar el área controlada de las instalaciones portuarias en un espacio de uso público, más permeable y accesible.
Nuevas conexiones peatonales y zonas estanciales
El plan propone nuevas conexiones peatonales y zonas estanciales. Estas facilitan la relación cotidiana entre vecinos y el frente marítimo, especialmente hacia la zona norte. También integra el Centro de Investigación que gestiona la Universitat Politècnica de València (UPV). Todo esto para que su actividad quede mejor conectada con el paseo portuario y el tejido urbano inmediato.
La presidenta de la Autoridad Portuaria de Valencia, Mar Chao, y el alcalde de Gandia, José Manuel Prieto, presentaron el proyecto ante la comisión municipal ‘Usos Tinglados. Interacción Port ciudad‘. Esta está formada por portavoces políticos, técnicos municipales y representantes del tejido económico y social. Incluye a la Cofradía de Pescadores, Destí Safor, la patronal empresarial de la comarca, el Campus de Gandia de la UPV y la consignataria del puerto. El diseño ha sido desarrollado por el equipo de Tomás Llavador a partir de la propuesta ganadora del concurso de ideas ‘Camins a la mar‘, de Peñín Arquitectos.
Dos ámbitos de intervención
El ámbito de actuación se concentra en dos zonas complementarias. La primera abarca el espacio entre los tinglados fruteros del 5 al 17, desde su fachada sur hasta el límite del ámbito portuario comercial. Hacia el norte se extiende hasta el cantil. La segunda comprende el edificio y la plaza de la Lonja, así como la plataforma situada al sur de la iglesia de Sant Nicolau.
En total, la intervención reserva 1.894 m2 a áreas ajardinadas e incorpora un estacionamiento con 78 plazas para ordenar la llegada en vehículo privado.
Eliminar barreras significa coser recorridos hoy interrumpidos, clarificar accesos y redistribuir el espacio para el peatón. La actuación permite transitar de forma continua entre ciudad y muelles, generando un frente portuario más amable y utilizable a diario por residentes y visitantes.
Itinerarios peatonales y sombra
El diseño responde a la peculiar geometría del entorno: un paseo longitudinal frente a los tinglados y, perpendicular a él, un espacio de mayor amplitud.
Con líneas de arbolado, parterres y diferentes despieces de pavimento se crean itinerarios. Estos invitan a entrar desde los accesos y conducen al ciudadano por todo el ámbito.
Frente a los tinglados se plantea una gran plaza cubierta por una pérgola. Esta aporta sombra y conecta con el resto de recorridos. Además, otras pérgolas más pequeñas y un arbolado de gran porte refuerzan el confort climático a lo largo del conjunto.
Estas soluciones de sombra y vegetación mejoran la estancia en los meses de mayor insolación. También favorecen usos cotidianos como el paseo y el encuentro vecinal, sin interferir con la operativa portuaria. La combinación de pavimentos y zonas verdes contribuye a ordenar flujos y a renaturalizar un espacio históricamente duro.
Antes de final de año
Antes de final de año se volverá a reunir la comisión municipal ‘Usos Tinglados. Interacción Port ciutat’ para abordar la actividad que se desarrollará en los tinglados, un punto clave para consolidar la nueva relación puerto-ciudad. Con la licitación en marcha, el calendario administrativo avanza para hacer realidad la transformación.
El alcalde, José Manuel Prieto, definió la intervención como ‘un proyecto estratégico de ciudad, de los más importantes que podamos abordar. Esta acción salda una deuda pendiente: la nueva mirada de la ciudad hacia el puerto a través de la reurbanización del entorno’. Por su parte, Mar Chao subrayó la finalidad de eliminar las barreras físicas entre ambos ámbitos.
Inversiones que superan los 30 millones de euros
La transformación del Puerto de Gandia moviliza inversiones que superan los 30 millones de euros. Incluye este proyecto de reurbanización, el Centro de Investigación en Tecnología para las Ciencias del Mar, la nueva Marina y la mejora del entorno de la iglesia de San Nicolau. También los Planes de Sostenibilidad Turística. Valenciaport aspira a situar el recinto como ‘referente de proyectos orientados al crecimiento de la economía azul’. Con ello, busca alinear la modernización urbana con nuevas oportunidades económicas vinculadas al mar.






