La Conselleria de Agricultura mantiene contacto permanente con los servicios veterinarios oficiales de la Comunitat Valenciana para aplicar todas las medidas de prevención y extremar las precauciones tras el brote de peste porcina africana detectado en Cataluña. El objetivo es reducir el riesgo de entrada del virus desde territorios vecinos y reforzar la bioseguridad en granjas y transportes, sin que hasta ahora se haya detectado ningún caso en la Comunitat.
Según el departamento, se van a mantener reuniones con el sector y con los veterinarios de las Agrupaciones de Defensa Sanitaria y las integradoras para incidir en el incremento de la vigilancia y en los protocolos de bioseguridad. Estos encuentros buscan unificar criterios, recordar obligaciones de limpieza y desinfección, ordenar los movimientos de animales y vehículos y reforzar el control de accesos y visitas a las explotaciones.
Control del jabalí y vigilancia en mataderos
Para este lunes se ha programado una reunión con el departamento de Medio Ambiente a fin de coordinar medidas de mayor vigilancia y control del jabalí en las zonas definidas como de mayor riesgo. La presión sobre las poblaciones de fauna silvestre pretende minimizar el contacto entre jabalíes y cerdos domésticos, uno de los principales vectores de transmisión indirecta en escenarios de PPA.
Además, Agricultura trabaja con Salud Pública para intensificar la vigilancia en mataderos. El seguimiento en canales y la trazabilidad permite detectar de forma temprana cualquier sospecha y activar rápidamente los protocolos de contención, sin alterar por ahora la operativa habitual del sector ni la comercialización de productos.
Desde el ámbito productor, la Asociación Valenciana de Agricultores ha asegurado que las explotaciones operan con normalidad y que ninguna granja de la Comunitat está afectada. La entidad ha pedido a la Administración reforzar las actuaciones para mejorar el control poblacional del jabalí, al considerar que el foco de jabalíes silvestres en Cataluña subraya la necesidad de evitar la superpoblación descontrolada de la fauna salvaje por el riesgo de transmisión de enfermedades.
La organización advierte de que una irrupción de la peste porcina africana en la Comunitat tendría, en sus palabras, ‘un impacto demoledor’ sobre la producción y la comercialización de la principal cabaña ganadera. La Comunitat cuenta con más de un millón de cabezas y cerca de 900 explotaciones, un volumen que exige mantener los estrictos protocolos de bioseguridad aplicados durante décadas.
Veterinarios de la asociación resaltan que la cabaña porcina valenciana permanece libre de PPA desde el foco de 1994 gracias al trabajo profesional del sector, la vigilancia continuada y la disciplina en bioseguridad. De ahí que, aun operando con normalidad, se insista en no bajar la guardia, en notificar de inmediato cualquier sospecha y en cumplir de forma escrupulosa las medidas de limpieza, desinfección y control de movimientos.






