Más de 200 familias se han visto afectadas por una trama dedicada a la estafa del “hijo en apuros”. Es un método con el que tres grupos criminales lograron obtener cerca de 120.000 euros en todo el territorio nacional.
La Policía Nacional ha detenido a 20 personas en las localidades de Torrent y Paterna por su implicación en este entramado. Utilizaban técnicas de ingeniería social a través de aplicaciones de mensajería instantánea.
Según la investigación, los estafadores contactaban con las víctimas. Se hacían pasar por sus hijos y simulaban encontrarse en una situación urgente que requería una transferencia bancaria inmediata.
Entre los detenidos se encuentra uno de los cabecillas, localizado en un chalet de lujo de una urbanización de Paterna. Allí, los agentes descubrieron una “habitación del pánico” protegida con una puerta blindada. En su interior se intervino una defensa extensible, un puño americano, un hacha y varios cartuchos de munición. En el registro se recuperaron también dispositivos electrónicos, joyas, un reloj de alta gama y 830 euros en efectivo.
Una investigación iniciada tras denuncias en varias provincias
La investigación comenzó el pasado mes de junio tras diversas denuncias presentadas en comisarías de distintas provincias. Las víctimas relataban haber recibido mensajes desde números desconocidos. Alguien se hacía pasar por su hijo, alegando estar en una situación urgente y pidiendo el envío inmediato de dinero.
Las primeras gestiones permitieron identificar las cuentas receptoras de las transferencias, la mayoría radicadas en Torrent. Luego los agentes localizaron a las llamadas “mulas de dinero”, personas que utilizaban sus cuentas bancarias para recibir el dinero estafado. Lo retiraban y lo entregaban a otros miembros del grupo criminal a cambio de una pequeña compensación. Varias de ellas han sido detenidas por su papel en la recogida y movimiento del efectivo.
El cabecilla, un joven de 25 años con elevado nivel de vida
El principal investigado resultó ser un joven de 25 años que residía en una vivienda de alto nivel adquisitivo. Esto, pese a no tener actividad laboral conocida. Los investigadores constataron que disponía de dispositivos electrónicos de gama alta, ropa y calzado de marcas de prestigio. Además tenía hasta cinco vehículos en propiedad y otro alquilado, aunque carecía de permiso de conducir. Tras su arresto, la autoridad judicial decretó su ingreso en prisión.
En total, han sido detenidas 20 personas relacionadas con delitos de estafa, blanqueo de capitales y pertenencia a grupo criminal. Todas ellas están presuntamente implicadas en esta red que operaba en varias provincias.
Cómo funciona la estafa del “hijo en apuros”
En esta modalidad delictiva, los autores contactan con las víctimas —habitualmente madres y padres— haciéndose pasar por sus hijos. Utilizan mensajes de texto o aplicaciones de mensajería para simular que han sufrido un percance. Por ello, necesitan dinero con urgencia para gastos médicos, de viaje o para adquirir un nuevo teléfono móvil. Para justificar el contacto desde un número desconocido, alegan que su supuesto teléfono está averiado.






