La alcaldesa de València, María José Catalá, ha destacado este martes el avance dentro del plazo previsto de las obras de reurbanización de las avenidas Pérez Galdós y Giorgeta. Este proyecto lo ha definido como “la obra urbana más importante que ha hecho el Ayuntamiento en los últimos 40 años”.
La primera fase de los trabajos ya ha concluido y permite la apertura provisional al tráfico de un tramo de unos 300 metros de la avenida de Giorgeta. Se encuentra entre las calles de Sant Vicent y Albacete, en sentido hacia el paseo de la Petxina, coincidiendo con el periodo navideño.
Una apertura provisional durante Navidad
El tramo reabierto permanecerá operativo durante las fiestas y volverá a cerrarse tras la festividad de Reyes para continuar con el resto de fases del proyecto. Según ha explicado la alcaldesa, esta apertura provisional permite aliviar parcialmente la movilidad en una de las zonas con mayor densidad de tráfico de la ciudad. Por esta zona circulan unos 56.000 vehículos diarios.
Catalá ha reconocido que se trata de una intervención compleja que está generando afecciones al tráfico. Sin embargo, ha defendido la necesidad de acometerla para dignificar esta área urbana y mejorar tanto el espacio público como las infraestructuras.
Aceras más amplias y transformación urbana
Tras seis meses de obras, ya se aprecia la transformación de la avenida. Las aceras que pasan de 1,4 metros a entre 3 y 7 metros de anchura. Esto permitirá ganar espacio para peatones, zonas de sombra con arbolado y un carril bici segregado.
La alcaldesa ha asegurado que Pérez Galdós y Giorgeta serán dos de las vías que más cambiarán en València. Además, ha subrayado que, una vez finalizada la obra, “todo serán ventajas” para el vecindario y para la movilidad urbana.
Mejoras invisibles pero clave en el subsuelo
Más allá de los cambios visibles, Catalá ha puesto el acento en las mejoras en el subsuelo. Aquí se está renovando la red de suministros para garantizar su correcto funcionamiento, especialmente en episodios de lluvias intensas. Una transformación que, según ha señalado, no solo es estética, sino también estructural y esencial para el futuro de la zona.
Entre las novedades asociadas a esta fase, se ha modificado el sentido de la calle Roís de Corella para mejorar la velocidad comercial de la EMT València. También se han habilitado 79 plazas de aparcamiento para motos en la calle de Sant Vicent con el objetivo de liberar espacios peatonales en el entorno de la estación Joaquín Sorolla.
Movilidad, carril bici y transporte público
Con la reapertura provisional, ya está operativo un tramo del carril bici entre Roís de Corella y Giorgeta. Además, a partir del 26 de diciembre entrarán en servicio nuevos tramos ciclistas en las calles de Joaquín Navarro y Sant Vicent. Estos estarán entre Creu Coberta y Joaquín Navarro.
En cuanto al transporte público, la reapertura afecta a las líneas 9, 10, 64 y C3 de la EMT. Esto permitirá mejorar la regularidad, reducir tiempos de recorrido y, en el caso de la línea 64, ahorrar hasta ocho minutos en los desplazamientos hacia el Hospital La Fe.
Una obra de casi 24 millones y alcance metropolitano
Las obras comenzaron el 30 de junio y cuentan con un presupuesto total de 23,9 millones de euros. Estos se financian con fondos europeos Next Generation. El proyecto actúa sobre una superficie de 100.000 metros cuadrados y más de dos kilómetros de longitud. La renovación integral incluye alumbrado, alcantarillado y la red semafórica.
El plan incluye 15 paradas de autobús, 26 pasos de peatones, 6.800 metros cuadrados de zonas verdes, tres parques infantiles y un carril bici bidireccional de 2,4 kilómetros, segregado de la calzada. La finalización de los trabajos está prevista para después del verano de 2026.





