El president de la Generalitat, Juanfran Pérez Llorca, ha visitado Utiel para trasladar ‘el cariño y la solidaridad’ del Consell a los vecinos afectados por la DANA del 29 de octubre de 2024.
En su primera visita institucional al municipio, ha recorrido el ayuntamiento y varias actuaciones de reconstrucción en marcha. Su objetivo era comprobar sobre el terreno el avance de los trabajos y acompañar a la corporación local en la recta final de la emergencia.
En la casa consistorial ha sido recibido por el alcalde, Ricardo Gabaldón, y miembros de la corporación, con quienes ha mantenido un breve encuentro.
Ha firmado en el libro de honor y ha recordado que Utiel fue de las primeras localidades en sufrir las consecuencias de aquellas inundaciones. Estas causaron importantes daños materiales en la zona.
Obras y coordinación institucional
El recorrido por las obras ha incluido puntos en los que se trabaja en la reposición de infraestructuras y servicios municipales. El president ha destacado el compromiso de los vecinos y del consistorio para acelerar la vuelta a la normalidad.
También ha subrayado que la prioridad pasa por culminar las reparaciones pendientes. Además, hay que reforzar la coordinación técnica entre administraciones para acortar plazos y simplificar trámites. Esto permitirá cerrar expedientes y reabrir equipamientos.
Como parte de ese seguimiento, ha puesto en valor el esfuerzo realizado desde el propio municipio. La meta era organizar la respuesta tras las lluvias, apoyar a las familias afectadas y levantar de nuevo los espacios dañados. Ha insistido en que el Consell acompañará al ayuntamiento en los próximos pasos. Esto incluye desde la supervisión de obras hasta el cierre de los trabajos aún abiertos.
Toma de posesión
Desde su toma de posesión a principios de este mes, en sustitución del dimitido Carlos Mazón, Pérez Llorca ha visitado otras localidades afectadas por la DANA del año pasado, como Picanya y Paiporta, además de Utiel.
Aquella emergencia dejó un fuerte impacto en la provincia de Valencia. En sus inundaciones murieron 230 personas. Este dato ha marcado el tono de estos encuentros y la voluntad de acelerar la recuperación.
