El sindicato CSIF ha reclamado más plazas estructurales y más recursos para poder hacer frente a la “elevada presión” que asegura “sufren los profesionales de Urgencias sanitarias”. Asimismo advierten de la “precariedad del colectivo dedicado a la atención en Urgencias y Emergencias, con plantilla escasa y sin los refuerzos suficientes en época vacacional, y la carestía de los medios necesarios”.
Por ese motivo, reclaman que la celebración el próximo 27 del Día Mundial de Medicina de Urgencias y Emergencias sea un “acicate” de mejora y un incentivo para mejorar sus condiciones.
Igualmente, la central sindical señala que la elevada presión asistencial en muchos centros de salud, el aumento de la población, sobre todo en época vacacional y en zonas del litoral, e incluso el elevado tiempo de espera en ocasiones para instalar en planta, que obliga a dilatar la presencia de pacientes en Urgencias, “son factores que han aumentado la carga de trabajo”.
De hecho, aseguran que el hospital La Fe de Valencia aumenta entre un 3 y un 4% al año la atención de los profesionales de Urgencias. El sindicato explica que estos profesionales de diferentes categorías tratan tanto a pacientes con urgencias reales como a todos aquellos que llegan al servicio, “pues el 60% acude por motivos de consulta menos urgentes o no urgentes al optar por ir al hospital en lugar de a su centro de salud”.
Además, también atienden a quienes, después de acudir a Urgencias y decidir el facultativo su ingreso, se hallan a la espera de que quede cama libre en planta. CSIF reivindica la tarea fundamental de estos profesionales y reclama a Conselleria de Sanitat que dote a las plantillas de plazas estructurales suficientes.
Reclaman medidas
Por ello, reclaman medidas como la adecuación de la plantilla en todas las categorías a las necesidades reales teniendo en cuenta los picos de afluencia, la ampliación de espacios para la adecuada atención del paciente dependiente o refuerzo de personal en periodo estival, sobre todo en hospitales de comarcas costeras.
Del mismo modo insiste en horarios que permitan realmente la conciliación de vida familiar y laboral sin pérdida de poder adquisitivo y un relevo generacional con la creación de más plazas y mejores condiciones, ya que “a la escasez de recursos se suma la complejidad cada vez mayor en la atención, en gran parte debido al incremento progresivo de la esperanza de vida”. Esta circunstancia, aseguran, deriva en estancias más largas en Urgencias o en el empleo de más procesos técnicos.
El sindicato reivindica igualmente la petición de la consideración de la especialidad de Urgencias en todas las categorías profesionales y una “mayor educación sanitaria” a la población que se iniciaría en el mismo colegio. En este sentido recalca que en hospitales como el citado La Fe de Valencia entre el 60 y el 70% de la atención en Urgencias corresponde a niveles 4 y 5 que podría ser tratada en centros de salud.
El sindicato apunta otros factores a impulsar, como las áreas de descanso, en especial de las bases de SAMU. En esta línea insiste igualmente en garantizar el equipo completo de personal sanitario en todas las unidades durante todo el año, con lo que hace hincapié en la cobertura de los planes de vacaciones.
