Las comunicaciones por carretera en la provincia de València siguen condicionadas este lunes por los efectos de las lluvias torrenciales del fin de semana. La CV-603, en Cullera, permanece cortada al tráfico, según ha informado la Dirección General de Tráfico (DGT).
La AP-7, que estuvo cerrada durante varias horas el domingo a la altura de Ulldecona y Freginals (Tarragona), ha recuperado la circulación y permite de nuevo el tránsito hacia Catalunya. No obstante, la N-340 continúa cortada en Amposta, lo que dificulta las comunicaciones entre ambas comunidades.
También se mantienen afectadas otras vías autonómicas, como la CV-1486 en Cabanes (Castellón) y un tramo de la AP-7 en Pilar de la Horadada (Alicante), donde un túnel sigue anegado. La DGT recomienda circular por la N-332 como ruta alternativa.
En la capital, sigue cerrado el paso inferior de Tres Forques–Rosa Casares por acumulación de agua, mientras que en las comarcas del interior algunos caminos rurales permanecen intransitables. Además, el tráfico se ha visto complicado por dos accidentes registrados en la A-7 y la A-3, a la altura de Picassent y Cheste, que han provocado retenciones a primera hora.
Por otra parte, Renfe ha confirmado que la circulación ferroviaria entre Ulldecona y L’Aldea seguirá suspendida durante todo el día debido a los desperfectos graves detectados en la infraestructura, que impiden garantizar la seguridad. La empresa ha indicado que los trenes circularán con normalidad entre Castellón y Alicante, mientras que los servicios de largo y media distancia hacia Catalunya permanecen interrumpidos.
Renfe ha habilitado cambios y anulaciones sin coste para los viajeros afectados y contactará con ellos mediante SMS o correo electrónico según los datos de reserva.
