Prendas de vestir, calzado, cosméticos y juguetes: estos regalos figuran en muchas listas de deseos de los consumidores durante las fiestas de Navidad y en el actual período de rebajas. Sin embargo, aunque estos productos generan un volumen de negocio de cientos de miles de millones de euros en la Unión Europea cada año, también son objeto de falsificaciones, las cuales pueden tener, además, graves consecuencias para la salud y la seguridad de los consumidores.
El coste que suponen las falsificaciones para los fabricantes en estos sectores asciende a 16.000 millones de euros en ventas cada año y, por consiguiente, se pierden casi 200.000 puestos de trabajo en la economía legítima. Estas son las conclusiones de un estudio publicado hoy por la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO) en el que se analiza el impacto económico de las falsificaciones en los sectores de la confección, la cosmética y los juguetes.
Un coste oculto con grandes repercusiones
Sobre la base de los datos de 2018-2021, el estudio de la EUIPO concluye que las ventas de ropa y calzado, cosméticos y juguetes legítimos sufrieron pérdidas anuales por valor de 12.000 millones de euros, 3.000 millones de euros y 1.000 millones de euros, respectivamente.
Conjuntamente, en todos estos sectores, Alemania, Francia, Italia, España y Austria registraron las mayores pérdidas, con una reducción de las ventas de productos auténticos de casi 8.000 millones de euros.
Sin embargo, los productos pirateados afectan más a algunos países que a otros, con diferencias significativas entre los distintos tipos de productos.
La industria del juguete es la más afectada por las falsificaciones; el informe indica que, en toda la UE, este sector sufre una pérdida global del 8,7%, con porcentajes que llegan a los dos dígitos en más de la mitad de los países de la UE. Malta (16,2%), Croacia (14,2%), Chipre (14,1%), Hungría (13,7%) y Eslovenia (13,1%) son cinco países en los que las ventas de juguetes son más susceptibles a los productos falsificados. Con unas pérdidas en volumen de ventas equivalentes a 334 millones, Alemania es el país más afectado por las falsificaciones de juguetes y representa un tercio de todas las pérdidas en ventas que se producen en la UE en el sector de los juguetes.
La industria de la confección y el calzado, el sector más grande analizado por el estudio en términos de ventas, se enfrenta a pérdidas de alrededor del 5% en Europa, encabezadas por Chipre (10,7%), Irlanda (10,2%), Luxemburgo (9,2%), Lituania (9,1%) y Estonia (8,7%).
De los tres sectores estudiados, el de la cosmética es el menos afectado por las falsificaciones. El informe de la EUIPO determina que las pérdidas para los productores de cosméticos auténticos ascendieron a algo menos del 5 % de las ventas totales en la UE. La industria cosmética francesa es la más afectada en términos absolutos, con pérdidas anuales de 800 millones de euros en ventas. El informe constató las pérdidas más acusadas en Bulgaria (8,7%), Chipre (7,9%), Rumanía (7,9%), Portugal (7,7%) y Hungría (7,6%).
Además de las pérdidas económicas y de los efectos en el mercado laboral, el informe señala que las falsificaciones en los sectores de la cosmética y los juguetes, en particular, pueden suponer importantes riesgos para la salud y la seguridad de los consumidores. Estos productos potencialmente perjudiciales representan el 15% de los artículos falsificados incautados en las fronteras exteriores de la UE, según una evaluación de las amenazas de los delitos contra la propiedad intelectual llevada a cabo por la EUIPO en 2022.
Productos falsificados y empleo
El estudio de la EUIPO sobre las tendencias de las ventas en estos tres sectores pone de relieve la magnitud de las falsificaciones para los negocios legítimos, que sufren los efectos de la disminución de las ventas y, como consecuencia directa, emplean a menos personas.
En Alemania, el mayor mercado de consumo de la UE, se pierden casi 40.000 puestos de trabajo en los sectores de la confección, la cosmética y los juguetes, según el informe. Otros países como Italia (24.241), Polonia (18.244), España (15.044) y Francia (14.427) también están sufriendo la pérdida de empleos en estos tres sectores.