Cuatro meses después de la devastadora DANA que golpeó la Comunitat Valenciana el pasado 29 de octubre, las diferencias en la gestión de las ayudas entre la Generalitat y el Gobierno central son notables. Mientras el Ejecutivo de Carlos Mazón ha pagado ya el 46% de las ayudas comprometidas, el Gobierno de España apenas ha abonado el 7,88% de las solicitudes presentadas por los afectados.
Según los últimos datos oficiales, la Generalitat Valenciana ha tramitado un total de 154.882 solicitudes de ayuda, de las cuales 115.886 ya han sido abonadas, lo que representa un total de 419,3 millones de euros desembolsados hasta la fecha. En cambio, el Estado ha gestionado un número significativamente menor de solicitudes y los pagos efectivos siguen siendo mínimos.
Diferencias clave en la gestión de las ayudas
Las cifras dejan en evidencia una gestión mucho más ágil por parte del Consell, que ha sido capaz de resolver el 75% de las ayudas solicitadas, mientras que el Gobierno central continúa con retrasos en la tramitación. Además, la administración autonómica ha destinado sus recursos a líneas de ayuda diversificadas, atendiendo tanto a municipios como a autónomos, empresas y familias afectadas.
Entre las medidas adoptadas por la Generalitat destacan:
- Rapidez en la resolución de ayudas: El 75% de las solicitudes ya han sido resueltas, garantizando un acceso rápido a los fondos para los damnificados.
- Pago efectivo de las ayudas: La Generalitat ha abonado el 46% del importe comprometido, asegurando que los recursos lleguen cuanto antes a quienes los necesitan.
- Cobertura a múltiples sectores: Se han destinado más de 192 millones de euros para autónomos y empresas, impulsando la recuperación económica de las zonas afectadas.
- Ayudas para bienes de primera necesidad: Se han concedido más de 22.000 ayudas para la reposición de enseres esenciales en los hogares damnificados, con un desembolso total de 135 millones de euros.
Por el contrario, el Gobierno central ha abonado solo 2.871 ayudas de primera necesidad en toda la Comunitat Valenciana, una cifra que contrasta con las más de 22.000 gestionadas por la Generalitat.
Las condiciones restrictivas del Estado en la ayuda a vehículos
Uno de los puntos que más diferencias marca entre ambas administraciones es la gestión de las ayudas para la compra de vehículos perdidos durante la riada. Mientras que la Generalitat concede estas ayudas sin condiciones adicionales, el Gobierno de Sánchez exige que el beneficiario adquiera un coche nuevo para poder recibir la subvención, con incentivos mayores si el vehículo es eléctrico.
Este requisito ha provocado que apenas 2.465 afectados hayan recibido la ayuda estatal, frente a las más de 71.000 que ya ha pagado la Generalitat Valenciana. Además, el Consell permite que una persona reciba tantas ayudas como vehículos tuviera registrados a su nombre, mientras que el Estado aplica restricciones adicionales.
El esfuerzo económico de la Generalitat frente a la falta de apoyo del Gobierno
Otro aspecto a tener en cuenta es la diferencia presupuestaria entre ambas administraciones. El Gobierno de España dispone de un presupuesto de 386.000 millones de euros, mientras que el de la Generalitat es de 31.500 millones, lo que supone una capacidad de financiación 12 veces menor. A pesar de ello, el esfuerzo del Consell en la reconstrucción ha sido mucho mayor, asegurando la llegada de recursos a los damnificados.
Además, la Generalitat sigue sin recibir las ayudas a fondo perdido solicitadas al Estado para la reparación de colegios, institutos, centros de salud y residencias en las comarcas afectadas.
Exclusión de municipios valencianos del plan de ayudas estatales
Otro de los puntos de conflicto es la exclusión de 28 municipios valencianos del plan de reconstrucción de infraestructuras municipales aprobado por el Gobierno central. Estas localidades, que suman una población de 80.000 habitantes, han quedado fuera de las ayudas estatales a pesar de los graves daños sufridos el 29 de octubre.
Ante esta situación, desde la Generalitat se exige al Ejecutivo de Sánchez que rectifique y agilice los pagos pendientes, garantizando que los afectados reciban la ayuda prometida en un plazo razonable. Cuatro meses después de la DANA, miles de valencianos siguen esperando soluciones que no llegan desde el Gobierno central.






