El Ministerio de Hacienda ha ofrecido este lunes a las comunidades autónomas un margen de déficit del 0,1 % del PIB en el periodo 2026-2028 y unas entregas a cuenta récord que ascienden a 157.731 millones de euros, según han confirmado fuentes de Hacienda.
La vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, se reúne esta mañana con las comunidades autónomas en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF), un paso previo a la elaboración de los presupuestos para el próximo año.
Una décima de déficit autonómico
Hacienda ha propuesto a las regiones un objetivo de déficit del 0,1 % del PIB para cada uno de los ejercicios 2026, 2027 y 2028, lo que les ofrece un margen presupuestario adicional de 5.485 millones en este periodo, según sus cálculos.
Hacienda tiene garantizada la aprobación de los objetivos de estabilidad, ya que cuenta con la mitad de los votos en el CPFF, por lo que le basta con que una sola región vote a favor.
Así, tras presentarla a regiones y corporaciones locales, el Gobierno aprobará la senda de estabilidad y el techo de gasto para el próximo año en el Consejo de Ministros del martes y después la remitirá al Congreso, donde podría encontrar dificultades para lograr su aval debido al rechazo Junts, que ya votó en contra de este mismo margen de déficit en la senda de déficit 2025-2027, que nunca llegó a aprobarse.
La senda de estabilidad (déficit, deuda y senda de gasto) es el paso previo a la elaboración de los presupuestos para el próximo año, pero la falta de objetivos aprobados y proyectos de presupuestos en los últimos ejercicios ha hecho que se quede muy desfasada.
En cualquier caso, el Gobierno podría presentar presupuestos si lleva en dos ocasiones la senda de estabilidad a las Cortes, aunque sean rechazadas, en cuyo caso entrarían en vigor los objetivos remitidos a Bruselas.
157.731 millones en entregas a cuenta
Además, Montero ha comunicado a las regiones que el próximo año recibirán 157.731 millones de euros en concepto de entregas a cuenta, un 7 % más que este año y la cifra más alta de la historia gracias a la buena dinámica de la economía española, que ha permitido mejorar la cifra estimada en julio.
Este importe de entregas a cuenta, sumado a la previsión de liquidación del ejercicio 2024, que se efectuará en 2026, elevará la financiación total a 170.300 millones de euros, un 7,7 % más que este año y el un máximo histórico.Los consejeros de Hacienda de comunidades gobernadas por el PP han señalado este lunes, al llegar a la reunión con la ministra, María Jesús Montero, en la que les expone la senda de déficit previa a los presupuestos para 2026, que es «un paripé» porque el Gobierno no tiene mayoría en el Congreso para sacarlos adelante y estarán «abocados al fracaso».
Los populares tildan de ‘paripé’ la reunión
De «paripé» ha definido la reunión Carolina España, la consejera de Hacienda de Andalucía, en declaraciones a la prensa al llegar al encuentro del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) que preside Montero.
«Ojalá aprobaran unos presupuestos generales del Estado, que llevamos tres años sin presupuesto, pero saben perfectamente que no tienen luego los votos», ha apuntado España al mostrar su «excepticismo» sobre lo que les va a contar Montero.
La consellera valenciana de Hacienda en funciones, Ruth Merino, ha afirmado que Montero convoca este órgano para dar «una falsa sensación de normalidad, como si realmente estuvieran gobernando», aunque unos posibles presupuestos generales del Estado para 2026 están «abocados al fracaso».
Tras esta reunión del CPFF, el Gobierno tiene previsto aprobar este martes la senda de déficit, que tendrá que conseguir el visto bueno del Congreso en las próximas semanas, de forma previa a que llegue a la Cámara Baja el proyecto de ley presupuestaria, sin que a priori en ambos casos haya una mayoría parlamentaria suficiente.
Varios consejeros del PP han lamentado también que el inicio del camino presupuestario, en cualquier caso, llega «tarde», como la consejera del ramo de la Comunidad de Madrid, Rocío Albert, que ha dicho que llega «con los arbolitos de las luces ya prácticamente encendidas» y los presupuestos autonómicos en tramitación.
Albert ha acusado a Hacienda de «ningunear» a las comunidades y, respecto a la reforma del modelo de financiación pendiente, ha dicho esperar que el nuevo sistema de financiación autonómica se pueda discutir «entre todos» y «no sean solo las conversaciones bilaterales que ha tenido hasta ahora Cataluña y la señora Montero».
El titular de Hacienda del Gobierno murciano, Luis Alberto Marín, ha pronosticado que este CPFF va a ser «un ‘déjà vu'» o «el día de la marmota» y que van a encontrarse con lo que ha sido la «norma común» en las últimas reuniones: «Un soliloquio de la ministra solamente pensado con la finalidad de contentar a los socios de gobierno, a independentistas, a secesionistas».
La consejera canaria de Hacienda, Matilde Asián -miembro del PP en el ejecutivo autonómico de Fernando Clavijo, de Coalición Canaria- ha asegurado que todas las comunidades acuden al encuentro con «ánimo constructivo», pero «fuera de plazo» y «tarde» porque llega cuando, como es su caso, ya se han presentado los presupuestos.
Los socialistas piden actitud constructiva
La consellera catalana de Economía, Alícia Romero, ha asegurado que llega a la reunión con actitud «constructiva, positiva y propositiva» y ha pedido al resto de autonomías que hagan lo mismo.
Otro socialista, el asturiano Guillermo Peláez, espera que transcurra «dentro de un marco de lealtad y de respeto institucional», para profundizar en las reglas de gasto para el presupuesto autonómico, que el Principado aún ha presentado y para el que reivindica que el Estado ponga más recursos en el modelo.
El acta del CPFF anterior
Varios consejeros del PP han expresado otra queja contra el Gobierno, referida al acta del CPFF anterior, al que asistieron pero se levantaron poco después de iniciarse la reunión, sobre el cual han presentado alegaciones.
Por ejemplo, la consejera extremeña, Elena Manzano, ha explicado que en los puntos relativos a la condonación de deuda y al impuesto a la banca no se abstuvieron, como reflejó el acta, sino que se ausentaron.
«Nosotros nos levantamos, ya no había el cuórum necesario para adoptar esos acuerdos, y lo que vamos a pedir es precisamente eso, que esos acuerdos no fueran aprobados», ha advertido Manzano.
