Los sindicatos CGT, SPPLB, CCOO, UGT, EMAD y CSIF han exigido al Consell que retire las encomiendas de gestión a los consorcios provinciales y que la Generalitat asuma de forma directa la gestión del cuerpo de bomberos forestales. Han subrayado que los efectivos dependen del SGISE y que la gestión centralizada permitiría un mando único y decisiones más ágiles en emergencias.
Los representantes han expresado su malestar por la renovación un año más de las encomiendas a los consorcios de València y Castelló, por 2,37 millones de euros, una fórmula que consideran una anomalía planteada en origen como provisional y que, según recuerdan, se ha perpetuado desde 1994. A su juicio, mantener este modelo alarga una situación transitoria durante décadas y dificulta la coordinación entre servicios.
Las encomiendas de gestión desplazan decisiones operativas a los consorcios, lo que, según los sindicatos, fragmenta la cadena de mando y complica la movilización de recursos cuando cada minuto cuenta. Han defendido que la asunción directa por la Generalitat permitiría unificar criterios, evitar duplicidades y optimizar la respuesta en incendios forestales y otros incidentes.
Críticas a la gestión de los consorcios
Los sindicatos han denunciado una mala praxis que estaría afectando a la efectividad del servicio, como la no movilización de bomberas y bomberos por criterios territoriales pese a existir competencias compartidas. Este filtro territorial, han señalado, puede retrasar tiempos de respuesta y dejar sin cobertura óptima zonas cercanas a los parques forestales.
Han lamentado que, por puro corporativismo, se ponga en riesgo a la población, aludiendo a la dana de 2024 y a audios de emergencias y consorcios que, según sostienen, lo evidencian. Otro efecto de esta mala gestión, han añadido, es el derroche de dinero público en horas extras ilegales, un gasto que, de confirmarse, desvía recursos que podrían reforzar equipos y turnos ordinarios.
Asimismo, han denunciado que, mientras se recurre a estas prácticas, no se moviliza a las bomberas y los bomberos forestales en sus jornadas diarias, algo que, insisten, no supondría incremento de coste. Han advertido también de que Antifraude está investigando 60.000 horas extra realizadas por personal del Consorcio de València durante la dana, un volumen que ilustra la dependencia de la extraordinaria frente a la ordinaria.
Según los sindicatos, los parques de los consorcios sufren una carencia de personal muy grande y, sin embargo, los gestores de la movilización prefieren dejar los parques con uno o dos componentes o telefonear a bomberos urbanos para que hagan horas extra en lugar de movilizar a los forestales, que pueden estar a escasos minutos de la emergencia. Este esquema, han señalado, reduce la capacidad de respuesta inmediata y concentra la carga en horas extraordinarias.
Qué cambiaría con la gestión directa
Las organizaciones han sostenido que una gestión directa por parte de la Generalitat, a través del SGISE, clarificaría competencias y protocolos. Con un mando único, la activación de brigadas forestales en su horario ordinario sería prioritaria, se acortarían tiempos de llegada y se disminuiría la dependencia de horas extra. Además, se alinearían recursos con las necesidades reales del territorio, reforzando la prevención y la intervención sin aumentar costes, y poniendo fin a una provisionalidad que, según recalcan, ha durado demasiado.
