El próximo lunes, la Generalitat celebrará una reunión de la mesa de seguimiento constituida junto a los principales agentes sociales y económicos de la Comunitat Valenciana —CEV, Cámaras de Comercio, UGT-PV y CCOO-PV— con el objetivo de analizar las consecuencias de la nueva política arancelaria internacional. El encuentro servirá para definir una estrategia conjunta que ayude a superar el contexto actual y refuerce la posición de las empresas valencianas, alicantinas y castellonenses en el comercio mundial.
Así lo ha anunciado el president de la Generalitat, Carlos Mazón, este sábado haciendo un llamamiento a la “unidad de acción”. El jefe del Consell ha defendido la necesidad de trabajar “de manera conjunta, unida y colectiva” para mejorar la competitividad y abrir nuevos mercados ante los desafíos del escenario económico global.
Mazón ha reafirmado el compromiso del Ejecutivo valenciano con los sectores más afectados por los cambios en las políticas arancelarias, como el agroalimentario, el cerámico, el calzado o los componentes del automóvil, pilares clave del tejido productivo valenciano.
En este sentido, ha insistido en que la administración autonómica quiere acompañar a las empresas en su proceso de expansión exterior, apostando por ampliar su vocación exportadora y explorar nuevos destinos comerciales. Entre las iniciativas destacadas, ha mencionado el Plan de Promoción Exterior, que contempla 88 acciones en 40 mercados estratégicos, con el fin de diversificar productos y destinos e impulsar sectores con alto valor añadido.
Coordinación estatal y europea
Por otra parte, el president ha reclamado una política económica nacional “consensuada y coordinada” con las comunidades autónomas, que aporte soluciones reales y adaptadas a las necesidades del tejido empresarial en el contexto actual.
También ha pedido una respuesta común por parte de la Unión Europea frente a las medidas adoptadas por Estados Unidos, exigiendo acciones inmediatas contra “barreras y aranceles injustificados” y una postura clara que defienda los intereses europeos.
Mazón ha recordado que las exportaciones de la Comunitat Valenciana al mercado estadounidense superan los 2.800 millones de euros, en sectores como el automóvil, la alimentación, el textil, la cerámica, el calzado y la industria química. Estas industrias, ha subrayado, son fundamentales para el desarrollo económico y la cohesión social de las tres provincias.






