El Valencia CF celebrará este miércoles su junta general de accionistas, a partir de las 10 horas en Feria Valencia, y presentará un presupuesto de 102,17 millones que no prevé ni beneficios ni pérdidas.
La entidad no ha confirmado si el presidente Kiat Lim acudirá de forma presencial o intervendrá a distancia, por lo que su presencia sigue en el aire.
Será la primera junta que afronte Kiat Lim como presidente desde su nombramiento en marzo en sustitución de Layhoon Chan, tras formar parte del consejo desde 2022. La cita llega después de que la junta de 2024 se suspendiera por las protestas de accionistas y se pasara directamente a las votaciones, un antecedente que añade expectación sobre el desarrollo de la sesión.
Un presupuesto neutro y deuda al alza
El plan económico para el próximo ejercicio se define como equilibrado: los 102,17 millones proyectados buscan cuadrar ingresos y gastos sin resultado contable.
Esta formulación permite a la entidad fijar objetivos de gestión sin comprometerse con ganancias que dependan de variables deportivas o de mercado.
En la última campaña, el club trasladó a los accionistas un presupuesto de 99 millones para 2024-25 y las cuentas se han cerrado con un beneficio antes de impuestos de 2,2 millones. La comparación sugiere un ligero aumento de actividad presupuestaria y una ejecución que, pese al entorno, se mantuvo en equilibrio.
La entidad presentará además un endeudamiento que ha pasado de 300 a 382 millones. El cambio relevante está en los plazos: la reconfiguración sitúa la deuda a largo plazo en 302 millones. Alargar vencimientos reduce la presión de tesorería inmediata y facilita la planificación, pero extiende los compromisos financieros y condiciona márgenes futuros.
Refinanciación y Nou Mestalla
Se espera que la directiva detalle la operación de refinanciación diseñada para afrontar la finalización de las obras del Nou Mestalla. El objetivo es completar el estadio en julio de 2027, con unos trabajos que se reanudaron en enero. Este calendario marca hitos que requieren coordinación entre financiación y ejecución para no desajustar el ritmo de inversión.
Sobre el papel del presidente, todavía se desconoce si su intervención será telemática o presencial. El técnico Carlos Corberán le restó trascendencia al formato: ‘La forma de comunicarnos y hacer las cosas en el club no depende de la presencia física o no. La comunicación del CEO (Ron Gourlay) con la propiedad, mía con el CEO y mía con la estructura deportiva es diaria’, dijo.
El contexto deportivo también pesará en el ambiente de la junta. El equipo marca la salvación empatado a 15 puntos con el Girona, que marca el descenso, y, si pierde este viernes ante el Mallorca en Mestalla, podría cerrar el año en puestos de descenso. Esta situación añade urgencia a las decisiones de gestión y puede intensificar el debate entre los accionistas.



