La ultraderecha gestionará dos consellerias y una vicepresidencia con competencias del nuevo gobierno del Partido Popular y VOX en la Comunitat Valenciana. La formación que dirige Santiago Abascal ha llegado a un acuerdo con los populares valencianos para dirigir la conselleria de Justicia, Interior y Gobernación, y Agricultura, así como una vicepresidencia primera unida a Cultura. Al frente de este departamento estará el torero y miembro de Vox, Vicente Barrera, según han confirmado en comunicado conjunto.
El gobierno encabezado por Carlos Mazón tendrá previsiblemente diez consellerias, siete carteras, incluyendo la de Presidencia, serán para los populares, y tres para Vox. Este reparto llega tan solo dos días después de la primera reunión entre ambas formaciones, que duró cerca de tres horas, y en la que el PP y VOX pactaron un nuevo Consell de coalición y ceder la presidencia de Les Corts Valencianes a los ultraconservadores.
Tras el “veto” a Carlos Flores y su marcha como candidato de Vox al Congreso por València, todo apunta a que Barrera se convertirá en uno de los hombres fuertes de los voxistas en el Consell. El diestro ha participado desde el primer momento en las negociaciones con el PP, tanto para conformar gobierno como para repartir carteras y desarrollar los programas, pese a no formar parte de la candidatura autonómica, sino que iba de número siete en la lista municipal de València.
Los equipos negociadores de los dos partidos también han cerrado un documento con 50 acuerdos programáticos que llevará a cabo la coalición en los próximos años siguiendo la línea de los cinco ejes estratégicos presentados el martes. ‘Libertad’, ‘Economía, ‘Mundo rural, Agua y Patrimonio’, ‘Reducción del gasto político’, ‘Educación y Lengua’, o ‘Políticas sociales, Familia y Vivienda’, son algunos de las áreas que recoge este pacto.
A lo largo del medio centenar de iniciativas, el PP asume en gran parte el discurso y las tesis de Vox y acuerda medidas como “promover políticas para erradicar la violencia intrafamiliar“, sustituyendo el concepto de “violencia de género” por “violencia intrafamiliar”; también abre la puerta a incorporar el “pin parental” y que los padres puedan “elegir libremente y autorizar el contenido de las actividades extracurriculares”; o poner en conocimiento de las autoridades policiales “posibles casos de inmigración ilegal con especial atención a las mafias organizadas”.
La formación ultraconservador y el PP además apuestan por crear una oficina ‘antiokupas’; derogar “las normas que atacan la reconciliación en los asuntos históricos”, es decir la Ley de Memoria Histórica valenciana; suprimir el impuesto de sucesiones, donaciones y patrimonio, y rebajas en todos los tramos del IRPF; además de eliminar “las subvenciones a las entidades o asociaciones que promuevan los ‘països catalans'”.
En dicho documento, el Partido Popular también se asegura los trece votos de Vox para investir a Carlos Mazón como ‘president’ en primera votación. Una investidura que los populares valencianos quieren acelerar para que no coincida con la recta final de la campaña a las generales, pero que los socialistas están dispuestos a tensar, tal y como aseguraron ayer.
Se comprometen así a dotar a la Comunitat un gobierno “estable y fuerte” y “que defienda los intereses de los ciudadanos y cumpla las cinco líneas básicas acordadas por ambas formaciones”. Además, ambas formaciones suscriben la “necesidad” de asegurar un gobierno de cambio en la Comunitat y se felicitan por “la generosidad mutua” en las negociaciones.
Educación se quedará en manos del PP
Aunque en un primer momento las informaciones apuntaban a que Vox podría encabezar Educación, Mazón despejó este miércoles la incógnita.El líder popular alejó los rumores que apuntaban a que los ultraconservadores gestionarían uno de los departamentos con mayor peso dentro del gobierno y dejó caer que ya tenía una persona pensada para el cargo. Algunas fuentes apuntan a José Antonio Rovira, ex director general de la conselleria y hombre fuerte de Mazón en Les Corts.
Otra de las cuestiones que avanzó, en una entrevista en la Cope, fue su intención de eliminar la Oficina de Derechos Lingüísticos y “un ejército de asesores lingüísticos nombrados a dedo por Compromís”, así como de “acabar” con el “procés a la valenciana” que aseguró se está produciendo en las aulas. De hecho en el programa electoral, los populares mostraban su intención de derogar el plurilingüismo y volver al modelo de líneas en valenciano o castellano.
Mazón también ha descartado esta mañana que vaya a haber una conselleria de Familias dentro del gobierno valenciano. Sin embargo, no ha dado más detalles de como repartirá el resto de carteras ni que competencias corresponderán al PP o que personas de su confianza entrarán al Consell. Lo que sí parece claro es que habrá otra vicepresidencia y será para los populares.
