En un inesperado y polémico giro político, Vox ha decidido romper la disciplina de voto de su propio equipo de gobierno en Torrent, formado junto al Partido Popular (PP), para alinearse con sus adversarios políticos de Compromís y PSOE. Esta decisión ha permitido que la oposición saque adelante una moción que exige la creación de una comisión de seguimiento del contrato de recogida de residuos y limpieza viaria, uno de los más importantes del municipio, valorado en 111 millones de euros. La ruptura ha provocado un notable malestar en el seno del equipo de gobierno local.
La propuesta, impulsada por Compromís-EU-Podem y defendida por su portavoz Xavier Martí, puso de manifiesto las numerosas quejas vecinales por el deficiente servicio de recogida de residuos. Según Martí, es necesario intensificar el control sobre la empresa adjudicataria debido a la magnitud del contrato, que tiene una duración de varias legislaturas y gestiona uno de los servicios esenciales de la ciudad. La moción también incluyó la creación de un portal de transparencia para que los vecinos puedan consultar los indicadores de rendimiento del servicio y verificar su cumplimiento.
Por su parte, José Gozalbo, concejal del PP y responsable del área, respondió que el Ayuntamiento ya dispone de informes mensuales sobre la gestión del contrato, que podrían ser facilitados a la oposición sin necesidad de crear una comisión. Según Gozalbo, la creación de comisiones similares en el pasado ha sido ineficaz, ya que muchas veces “se reúnen una vez y luego no se da continuidad”. Sin embargo, también reconoció que existen aspectos que deben mejorar, como la insuficiente presencia de barrenderos en algunas zonas de la ciudad.
La ruptura de Vox: una traición a su propio equipo de gobierno
El momento más tenso de la sesión plenaria llegó cuando Guillermo Mª Alonso, portavoz de Vox en Torrent, optó por votar a favor de la moción junto a la oposición, rompiendo el acuerdo previo con el PP, que había decidido votar en contra de la iniciativa. Esta decisión fue percibida como una traición política por parte del PP, que esperaba una postura unificada del equipo de gobierno para rechazar la propuesta de Compromís.
Lo que más sorprende es que no es la primera vez que Vox actúa en contra de los intereses de su propio equipo de gobierno. En anteriores plenos, Alonso ya había mostrado complicidad con la oposición en votaciones como la moción sobre la libertad de prensa o había manifestado reparos a decisiones clave del PP, aunque en aquellos casos, finalmente, respaldó a sus socios de gobierno. Sin embargo, en esta ocasión, la postura de Vox fue determinante para que la moción saliera adelante.
El Partido Popular ahora se enfrenta a una situación incómoda, ya que esta alianza momentánea entre Vox y Compromís pone en entredicho la solidez de la coalición de gobierno en Torrent. Vox se ha alineado con sus enemigos políticos, permitiendo que la oposición consiga una victoria importante en un tema tan sensible como la gestión de residuos. Esta decisión ha dejado a muchos preguntándose si esta ruptura es un hecho aislado o si representa un quiebre más profundo en la relación entre Vox y el PP en el municipio.
