Casi mil personas se han concentrado a las puertas del Roig Arena de València para protestar contra Israel mientras el Valencia Basket recibía al Hapoel Tel Aviv en la Euroliga.
El club ha disputado el encuentro sin público por recomendación de las fuerzas de seguridad y de la Delegación del Gobierno, una medida orientada a minimizar riesgos y facilitar el control del perímetro del pabellón.
Los asistentes han coreado consignas a favor del boicot y acusaron a Israel de ser ‘un Estado genocida’. También han cuestionado la ausencia de sanciones y criticado la respuesta europea, con lemas como ‘Gaza sangrando y Europa observando’. Estas proclamas han marcado el tono de una concentración que combinó denuncia política y presión simbólica coincidiendo con la cita deportiva.
Dispositivo de seguridad y acceso del Hapoel
Una hora y media antes del inicio del partido, el intento de varios manifestantes de romper el cordón policial para acercarse al recinto derivó en una breve carga de los antidisturbios. Pese a ese momento de tensión, el acceso del Hapoel Tel Aviv se produjo alrededor de las 18.00, antes de lo habitual en un duelo de Euroliga, y sin incidentes. La Policía ha habilitado la entrada del autobús en contradirección por la avenida Antonio Ferrandis para agilizar la maniobra y acotar tiempos de exposición en el entorno.
La convocatoria ha arrancado con llamamientos a concentrarse en las cuatro esquinas del recinto, pero con el paso de los minutos el grupo acabó reuniéndose en un único punto. Ese reagrupamiento redujo la dispersión en las inmediaciones y focalizó los cánticos frente a uno de los accesos principales, lo que dio mayor continuidad a la protesta.
Según ha comunicado la Delegación del Gobierno, el dispositivo de seguridad desplegó alrededor de medio millar de agentes. La presencia de un contingente amplio fue coherente con la decisión de jugar a puerta cerrada y con la expectativa de una asistencia multitudinaria, dos factores que ponen el énfasis en prevenir incidentes y mantener despejadas las rutas de entrada y salida del pabellón.
Entre las banderas palestinas destacaron pancartas de BDS País Valencià con el lema ‘Esport sí, Genocidi no’. El Sindicat d’Estudiants exhibió otra en la que se leía ‘La pau dels genocides es una farsa. Palestina lliure’. También se vieron enseñas de organizaciones como CGT, CNT o COS, que subrayaron el carácter social y estudiantil de la movilización. Con todo, más allá de la breve carga, la tarde transcurrió sin incidentes reseñables durante la llegada del equipo visitante.
