La entidad vecinal Amics del Carme, que aglutina a vecinos y comerciantes del barrio, saldrá este viernes a la calle contra el Área de Prioridad Residencial (APR) porque aseguran que en “todos los residentes tienen derecho de paso”. Por ello, esta tarde, a partir de las 18.30 horas, han convocado una protesta en la plaza de Nápoles y Sicilia para expresar su malestar con la “exclusión” que sufren algunos vecinos.
En un comunicado distribuido a través de las redes sociales, explican que “una cosa es contener el tránsito oportunista, una cosa es adoptar medidas para frenar la presión de los vehículos a motor, y otra, muy distinta, partir el barrio como si fuera quesitos y dejar fuera a casi un tercio de sus residentes de forma arbitraria e innecesaria”.
Y es que las cámaras de tráfico han interpuesto 11.591 denuncias a vehículos no autorizados en tan solo dos meses desde la puesta en marcha el pasado mes del diciembre de este mecanismo para regular el tráfico del centro de la ciudad, según el servicio de Procedimiento Sancionador. Del total unas 5.000 están todavía en trámite y contemplan multas de 60 euros por esta infracción.
“No hay derecho, tengamos o no ‘tarjeta naranja’, a no poder circular por ‘nuestro’ barrio, ni que las escuelas no puedan gestionar sus necesidades de acceso” denuncia el movimiento vecinal, que asegura que los hoteles y apartamentos turísticos sí podrán dar de alta a sus clientes para que circulen “libremente”, pero no el vecindario porque “a los ojos del ayuntamiento nosotros somos de segunda”.
Asimismo, manifiestan que están a favor de una Área de Prioridad Residencial, de limitar el tránsito de vehículos y de facilitar que en Ciutat Vella “puedan vivir y crecer las familias”, pero habilitándose un servicio que contenga los vehículos y no a sus vecinos y vecinas a los afirman se les “retira” el derecho de paso.
“Esta es la razón por la que vamos a salir a la calle, porque el Sr Concejal Giuseppe Grezzi se niega a hablar con los vecinos, cuando públicamente dijo que lo haría y porque la APR que ha montado en Ciutat Vella castiga a sus residentes de forma innecesaria y banal” expresan en el comunicado.
