La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA) ha advertido de los “graves problemas” provocados por la sequía y ha mostrado la “preocupación” del sector por los “graves problemas” que causan las restricciones de riego y los sobrecostes en las producciones agrícolas y ganaderas de la Comunitat Valenciana.
Una situación que resulta “especialmente alarmante” para los ganaderos en el interior de Castellón y Valencia, que advierten de una escasez de agua y de pastos “inusual” en época primaveral, según ha informado la entidad en un comunicado.
Ante la falta de lluvias, Asaja ha señalado que los ganaderos se han visto obligados a costear el transporte de agua en camiones, con un coste de “casi mil euros por viaje“.
En este sentido, el ganadero y delegado de AVA-ASAJA en Morella, Marc Boix, ha asegurado que están realizando variaciones en la dieta de los animales para mantenerlos “más hidratados” y “reducir sus esfuerzos para no cansarlos y evitar ponerlos en peligro“.
Respecto a los cultivos, la sequía y las altas temperaturas hacen que los agricultores utilicen del riego, con el gasto añadido que conlleva. En naranjas y mandarinas, que en este momento se encuentran en fase de recolección y/o floración, “muchos árboles” sufren deshidratación hasta el punto de que están “más vulnerables” frente a enfermedades y plagas.
En esta línea, el responsable de la sectorial de naranjas de AVA-ASAJA, Alejandro Aparicio, ha advertido de que el uso de depredadores para la lucha biológica contra el Cotonet de Sudáfrica o la araña “no está siendo del todo efectivo debido a que éstos no se adaptan a las altas temperaturas. Asumimos importantes sobrecostes en energía eléctrica para regadío y en tratamientos fitosanitarios”.
Parecida situación vive el caqui, donde el responsable de la sectorial, Vicente Carmelo Burches, explica que “no solo está tardando en brotar, sino que lo hace de manera irregular, por lo que lógicamente nos preocupa el volumen de la próxima cosecha“.
SITUACIÓN “ALARMANTE”
También los productores de uva tienen que recurrir al riego de apoyo, en el caso de disponer de esta posibilidad, para evitar que las cepas se sequen. Comarcas interiores como Utiel-Requena padecen las consecuencias de la sequía por segundo año consecutivo.
En el caso del almendro, el responsable de la sectorial de frutos secos, Armando Boullosa ha calificado la situación de “alarmante”, mientras que en el olivo, a diferencia de Andalucía, donde ha llovido en las últimas semanas, se prevé una producción “corta”.
Al mismo tiempo, el responsable de la sectorial de fruta dulce, José Luis Sanz, ha señalado que la falta de lluvias y las primeras restricciones de riego van a ocasionar una “bajada de la producción de melocotones y albaricoques, incluso en algunos puntos una merma del calibre, pero esperamos que la gran calidad de la fruta permita obtener unos precios que compensen el aumento de los costes“.
Sanz ha apuntado, además, que los agricultores de la demarcación de la Confederación Hidrográfica del Júcar han solicitado autorización para el uso de pozos de emergencia.
Por todo ello, AVA-ASAJA ha reclamado al Gobierno central y al Ministerio para la Transición Ecológica a “replantee” su política hídrica y apueste por la construcción de infraestructuras para almacenar el agua cuando llueve y distribuirla a las zonas deficitarias “cuando la necesitan“.
A su vez, han criticado que “desde la ideología y el ecologismo radical la Ley de Restauración de la Naturaleza, como si en España lloviera como en el centro y norte de Europa, nos lleva al abandono de campos, a los incendios y al desierto“.
La organización agraria ha solicitado a las Administraciones que mejoren los seguros agrarios para cubrir todos los riesgos climáticos, que pongan en práctica las nuevas técnicas de edición genética para obtener cultivos mejor adaptados al cambio climático y que establezcan medidas de apoyo a los agricultores y ganaderos afectados por la sequía y las altas temperaturas.
