Las mujeres suponen el 51,44 por ciento de la población en edad de trabajar en la Comunitat Valenciana, pero siguen teniendo menor presencia en el mercado de trabajo (46,5%) –el mejor dato de toda la serie histórica– y constituyen el 75% de las jornadas parciales.
Esta es una de las principales conclusiones del informe sobre la situación sociolaboral de las mujeres en la Comunitat Valenciana, que han presentado este viernes, con motivo del 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, la secretaria general de CCOO PV, Ana García, y la responsable de Mujeres e Igualdad de CCOO PV, Cloti Iborra.
Este estudio recoge que la tasa de actividad femenina (53,9%) es menor que la masculina (63,9%). A pesar de tener la mayor tasa de empleo femenina de la historia, existe una brecha de más de nueve puntos entre ambos sexos (de 47% mujeres y 56,3% hombres). Correlativamente la tasa de inactividad de las mujeres es mayor (46,1%) que la de los hombres (36,1%).
Asimismo, las mujeres sufren una mayor tasa de desempleo (12,9% frente al 11,9% de los hombres). En concreto, en el cuarto trimestre de 2024, el 48,9% de la población parada en la Comunitat Valenciana tiene rostro de mujer. De las 163.200 mujeres desempleadas son 9.300 las que buscan su primer empleo, esto es el 5,7%.
La tasa de asalarización femenina también es mayor (88,2%) que la masculina (79,5%). El 11,8% de las mujeres que trabajan lo hacen como autónomas.
En cuanto a las solicitudes de excedencias por cuidado de menores, el último dato disponible es el de 2023, cuando se pidieron un total de 3.961 excedencias por cuidado de menores, de las que el 87,7% fueron instadas por mujeres (3.474) y el 12,3% por hombres (487). Las solicitadas por hombres han aumentado desde 2013 cuando se situaban en un 4,6%.
Todas estas brechas confluyen en una reducción en los ingresos de las mujeres, tanto en salarios como en pensiones. Los últimos datos disponibles de la Encuesta anual de estructura salarial (EES) muestran que en el año 2022 la brecha salarial de género en la Comunitat Valenciana fue del 17,0%, es decir, los hombres ganaron 4.549 euros más, pues su salario medio anual fue de 26.683 euros mientras que el de las mujeres valencianas fue de 22.135 euros. En el año 2021 fue del 20,2%, lo que supone una reducción de 3,2 puntos respecto al año anterior.
Respecto a las pensiones, según los datos de la Seguridad Social, en el año 2022 las mujeres de la Comunitat Valenciana percibieron un 32% menos de pensión media mensual que los hombres; con 1.395 euros al mes para los hombres y 948 euros para las mujeres, lo que supone una diferencia de 446 euros al mes.
«Dificulta la promoción»
García ha subrayado, en declaraciones a los medios, que la jornada parcial «dificulta a las mujeres la promoción y las trayectorias laborales», ya que «es muy difícil acceder a la formación dentro de la empresa –con este tipo de jornada– y, por lo tanto, a la promoción».
«Nos encontramos con techos de cristal en algunos casos y con suelos pegajosos. Por lo tanto, es difícil que las mujeres puedan tener unas carreras profesionales de lo que suelen llamar exitosas a lo largo de su vida», ha manifestado, al tiempo que ha defendido que «es justo exigir esa igualdad real y efectiva».
En esta línea, ha subrayado que «hay que corregir estas dificultades que vienen de un componente puramente estructural: si hay un trabajo temporal, hay una reducción de la jornada o hay desempleo, normalmente tiene rostro de mujer». «También en muchas ocasiones lo que nos acompaña a las mujeres es que nos han asignado el rol de los cuidados, por eso es importante que se realicen políticas públicas en ese aspecto, porque los cuidados se aprenden y los podemos desarrollar tanto las mujeres como los hombres», ha remarcado.
García ha destacado que «también ha habido avances»: «Hace unos años la brecha salarial y en pensiones era más grande. Entonces, hay que quedarse con que las políticas que se han implantado, fruto muchas de ellas del diálogo social, han mejorado y han disminuido esas brechas».
En este sentido, ha detallado que algunas de estas medidas son «el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) o los salarios en los convenios colectivos». «Sí que ha habido mejoras y apostamos, como no puede ser de otra forma, por políticas públicas con recursos económicos para avanzar en esa igualdad que necesitamos», ha subrayado.
«Escudo social» frente a la Dana
Preguntada por el impacto de la dana, ha indicado que «todavía no se tienen cifras», pero «lo positivo es que se ha puesto en marcha un escudo social para proteger la economía y el empleo». «Sigue habiendo muchas personas que continúan en ERTE, entonces no tenemos un dato fidedigno para poder decir el impacto que ha habido entre hombres y mujeres», ha reiterado.
Por su parte, la responsable de Mujeres e Igualdad ha celebrado que las políticas públicas «funcionan», pues «se están reduciendo las brechas». «Vamos avanzando, aunque es tan lento que es imprescindible seguir apostando por las políticas que funcionan, pero que necesitan tiempo, constancia, perseverancia, compromiso y presupuestos», ha destacado, al tiempo que ha agregado que «también hay que incidir en otros ámbitos como el educativo».
Iborra ha incidido en que el cambio «es muy lento» y «necesita agilizarse», y ha denunciado que «los partidos de la ultraderecha saben que las políticas funcionan y por eso las quieren eliminar».
Por todo ello, desde CCOO PV han propuesto, entre otras medidas, seguir incrementado el SMI hasta situarlo en el 60% de la media salarial, en cumplimiento de la Carta Social Europea, y dignificar el sector de cuidados, que «se encuentra infravalorado socialmente y en consecuencia infra-remunerado».
En este sentido, han defendido que la ciudadanía «tiene derecho al cuidado y el Estado debe ser garante de este derecho» por lo que, además de una red universal y pública de políticas de cuidado, han exigido un Pacto Estatal por los cuidados.