La Confederación Empresarial de la Comunitat Valenciana (CEV) ha valorado las nuevas ayudas a los afectados por la DANA recogidas en el Real Decreto-ley 7/2024, pero ha advertido que “será necesario un esfuerzo mayor por parte del sector público para relanzar la actividad económica de la zona” y garantizar “la supervivencia de las empresas afectadas y el mantenimiento de los puestos de trabajo”.
La patronal, en un comunicado, ha lamentado que “el apoyo directo al tejido productivo sigue siendo claramente insuficiente”. Cerca del 50 por ciento del monto económico de los dos reales decretos aprobados por el Gobierno se destina a avales públicos del ICO, y cubrirá el 80% de los créditos y préstamos que soliciten empresas y hogares; créditos y préstamos que los interesados deberán devolver en los plazos convenidos.
“No son ayudas directas”, ha afirmado. Además, como en otras ocasiones, las líneas de avales ICO y los consiguientes créditos y préstamos de las entidades bancarias con esta cobertura “todavía tardarán en ponerse en marcha”, según la CEV.
Por tanto, la confederación ha avisado de que, “sin un plan de respuesta que incluya más ayudas directas y sin que éstas lleguen de forma ágil, la reconstrucción y el relanzamiento económico serán realmente complicados”. “Es lo que están demandando empresas y trabajadores, para retomar la actividad y para mantener el máximo número de puestos de trabajo”, ha asegurado Salvador Navarro, tras una reunión de la junta directiva extraordinaria celebrada este miércoles.
La CEV pide un plan renove también para equipamiento
En paralelo, la CEV ha insistido en que el nivel de la catástrofe es tal que resulta igualmente urgente activar un potente plan Renove, pensado no únicamente para la adquisición de vehículos sin también de equipamiento y llama a incluirlo en el próximo paquete de medidas que contemple el Gobierno.
Igualmente, en opinión de la patronal, sigue faltando “un importante paquete de deducciones fiscales” en el IRPF e Impuesto sobre Sociedades que ayude en la reparación y reposición de bienes e incentiven la reconstrucción y reposición del inmovilizado.
La CEV considera “un error” el igualar la situación a la de la COVID, en la que la actividad empresarial “simplemente se hibernó y se fue recuperando según sectores y territorios hasta alcanzar su plenitud en todos los casos, o con la situación derivada de la falta de suministros de la guerra de Ucrania, en la que las empresas también tenían intacto su capital, bienes de equipo, maquinaria y plantillas”.
“En este caso la devastación, más allá del dolor de pérdidas humanas, alcanza a la desaparición de las instalaciones, suministros básicos, maquinaria, etc y aboca a miles de pymes, a la desaparición, si no reciben la ayuda necesaria y a tiempo. Para ayudar al territorio y volver a la normalidad, hay que recobrar poco a poco la actividad. Este debe ser el objetivo en estos momentos”, ha subrayado.
La CEV considera algunas medidas laborales “perniciosas”
En materia laboral, la opinión de la CEV es que, en la actual coyuntura, el teletrabajo es la mejor opción, aunque no sea posible en todos los casos ni en todos los sectores. En cambio, considera que “algunas de las medidas adoptadas por el Ministerio de Trabajo en relación con las empresas que vean impedida o limitada su actividad como consecuencia de la DANA son manifiestamente perniciosas para la continuidad de su actividad, que como se señalaba anteriormente es clave para la recuperación”.
Para muchas empresas el ERTE-DANA en las condiciones que impone el Real Decreto “no va a ser una solución, del mismo modo que es fundamental que tanto trabajadores como empresas sepan a qué atenerse, lo que exige un marco jurídico y legislativo claro y que genere confianza”, ha afirmado la CEV.