Compromís ha denunciado este lunes que el conseller de Educación, José Antonio Rovira, ha gastado 11.968 euros en comidas pagadas con dinero público durante sus primeros veinte meses en el cargo según las facturas a las que ha tenido acceso, 38 de las cuales corresponden a cenas, algunas de ellas dominicales.
En rueda de prensa, el síndic de Compromís en Les Corts, Joan Baldoví, acompañado por los diputados Gerard Fullana y Verònica Ruiz, ha detallado que se han contabilizado 84 facturas por valor de 11.968 euros, de las cuales 38 corresponden a cenas, algunas de ellas realizadas en domingo o finalizadas de madrugada.
Baldoví ha criticado que “no se puede justificar una cena de trabajo un domingo por la noche” y ha calificado de “gira gastronómica” el uso de los fondos públicos por parte del conseller.
Además, Baldoví ha cuestionado que se trate de reuniones de trabajo, al no constar el motivo ni los asistentes en las facturas.
«Es un conseller caradura que se piensa que la Generalitat es su cajero automático para que le paguemos su gira gastronómica”, ha denunciado el síndic.
Reclaman facturas
Compromís ha reclamado las facturas y las ha conseguido mediante peticiones parlamentarias de documentación, pues no están disponibles en el Portal de Transparencia, y ha abierto la web roviraleaks.compromis.net para hacerlas públicas.
El portavoz ha señalado que su formación también ha solicitado sin éxito las facturas del president de la Generalitat, Carlos Mazón, lo que, a su juicio, supone un intento de dificultar la labor de control de la oposición.
Además, Baldoví ha vinculado estos gastos con los recortes en educación, y ha denunciado la falta de coherencia entre el ajuste presupuestario en las aulas y el uso de recursos públicos para fines personales.
Compromís ha recordado que Rovira cobra un salario anual de 85.000 euros, incluyendo un plus de residencia de 10.000 euros, destinado a cubrir gastos por vivir en València.
En el ámbito cultural, Verònica Ruiz ha lamentado la ausencia de Rovira en actos relevantes del sector y ha criticado que “mientras los artistas denuncian precariedad y falta de interlocución, el conseller sigue gastando en restaurantes con dinero de todos”.
