PSPV y Compromís, los partidos de la oposición en el Ayuntamiento de València, han advertido este jueves a la alcaldesa de València, María José Catalá, que restringir la venta de alcohol en las barras de las comisiones falleras a partir de las 02.00 horas de la madrugada en las próximas Fallas fomentará “el botellón” y supondrá un “castigo a las comisiones”.
Unas criticas llegan tras hacerse publica la normativa que recoge el bando fallero y que establece que el horario de dispensación de alcohol en las barras de bebidas en las zonas de actividades será hasta las dos de la madrugada. Además, las verbenas y discomóviles tendrán permiso hasta las cuatro de la madrugada, aunque el Ayuntamiento recomienda a las comisiones del entorno de la Llotja, Mercado Central y Russafa que realicen sus verbenas en horario vespertino.
El concejal de Compromís per València, Pere Fuset, ha cargado hoy contra las novedades anunciadas ayer por el gobierno municipal de PP y VOX relativas a las Fallas 2024. Fuset señala que el PP “no solo incumple su promesa de avanzar las directrices falleras que llegan más tarde que nunca sino que introduce novedades incoherentes que afectan a la convivencia de València con su fiesta grande”.
El concejal valencianista y expresidente de la Junta Central Fallera considera que “cerrar las barras falleras a las 2 y mantener las verbenas a las 4 es incoherente pero, además, es peligroso. La señora Català, con esta propuesta, lo único que hace es fomentar el incivismo, el conflicto a las fallas y, sobre todo, un botellón descontrolado por toda la ciudad.” Una medida que en opinión de Compromís “no beneficia a nadie, no servirá para reducir el consumo de alcohol y aumentará los conflictos hacia unas comisiones falleras que serán incapaces de hacer frente al botellón en sus demarcaciones o explicar al resto del vecindario por qué están excluidos de la fiesta”.
“Estas ocurrencias van en contra de la imagen de la fiesta, como también avanzar la salida de las carpas al 5 de marzo o aumentar el impacto de los mercaditos y a las buñolerías en las calles sin abordar el futuro de las ‘mojiterías’ como proponíamos. Medidas que crearán confrontación y son absolutamente contrarias al espíritu que tiene que tener el Bando Fallero, que es buscar la conciliación y el encuentro en una fiesta que tiene que ser inclusiva para todos y todas”, ha asegurado.
Compromís ha lamentado también que “Català haga retroceder en la fiesta en la descentralización suprimiendo del programa de festejos las mascletaes de los barrios”. En cambio Fuset ha valorado positivamente el adelanto de todos los castillos de fuegos artificiales a las 12 de la noche lamentando “el cinismo del Partido Popular que rechazó el pasado mes de octubre una propuesta de Compromís en este sentido a la comisión de Bienestar y Cultura”.
Compromís considera que con estas medidas el regidor de Fallas, Santiago Ballester demuestra que “las palabras en la oposición se quedan en papel mojado cuando toca trabajar en la gestión. Y que su visión de la fiesta es extremadamente parcial, alejada de las comisiones de barrio más modestas y sobre todo del conjunto de la ciudadanía a quien obvia y enfrenta con la fiesta. “Crear más ‘haters’ hacia las fallas no es defenderlas”.
“Castigan a las comisiones”
Una posición que también comparte la concejala socialista Nuria Llopis ha criticado que “los únicos perjudicados por las restricciones que el gobierno de Catalá quiere aplicar a las verbenas falleras van a ser los propios falleros y falleras, que van a pagar la factura de un problema que ni generan ellos ni se va a resolver por impedir a las comisiones que pongan una barra más allá de las dos de la mañana. Es más, restringir los horarios de las barras falleras lo único que va a conseguir es multiplicar el botellón por toda la ciudad”, ha denunciado.
Llopis, además, ha señalado que el Bando de las Fallas tan solo establece restricciones para las barras que montan las comisiones falleras, ya que el resto de establecimientos de ocio que permanezcan abiertos podrán seguir dispensando bebidas hasta la hora de cierre, lo “que supone un agravio para las barras que montan los falleros y falleras”.
Y es que, la edil socialista ha recordado que la recaudación procedente de las verbenas es “una de las mayores fuentes de ingresos para las comisiones falleras y privarlas de estos recursos tendrá un impacto muy negativo en las Fallas de 2025. A nadie se le escapa que los ingresos que no puedan obtener las comisiones a lo largo de 2024 se verán reflejado al final en las Fallas del año que viene”, ha continuado.
Para Llopis estas restricciones que pretende aplicar el gobierno de Catalá demuestran “su poca empatía con las fallas de la ciudad, que consiguen cuadrar sus presupuestos cada año con mucho esfuerzo de sus falleros y falleras para que ahora se vean privadas de una gran parte de sus ingresos por una decisión caprichosa y que, al final, va a acabar provocando un problema mayor, que es la multiplicación de los botellones”, ha finalizado.
