Los partidos de la oposición, Compromís y PSPV-PSOE, han criticado este viernes el pacto de gobierno entre PP y VOX en el Ayuntamiento de València y que la alcaldesa haya “cedido” ante las presiones del partido de Santiago Abascal. Un acuerdo que llega tras cuatro meses de negociaciones, pero que tampoco les sorprende, ya que aseguran la aritmética es la que es y para poder sacar adelante cuestiones como las ordenanzas fiscales o los presupuesto hacía falta una mayoría absoluta.
Por su parte, el portavoz de Compromís en València, Joan Ribó, ha lamentado este viernes que finalmente se haya materializado este pacto de gobierno entre ambas formaciones. Un acuerdo que ha apodado de “pacto de embolao” porque “es un embolao bastante terrible” para la ciudad y por la “pasición” de ambos partidos a los toros embolados.
“Esto estaba escrito en las estrellas y sabíamos que la conjunción astral que lo iba a concretar era la proximidad de los presupuestos como se ha producido” ha asegurado Ribó, que también ha mostrado su preocupación sobre que la formación ultraderechista asuma las competencia de Parques y Jardines con la gestión de la Albufera, o la delegación de Familia.
Ribó también ha afirmado que esta decisión “no cambia demasiado las cosas” porque el comportamiento del PP “en muchos aspectos ya era muy parecido al de Vox”. Sin embargo se ha mostrado “preocupado” en que se puedan producir “retrocesos” en la lucha contra el cambio climático o la igualdad desde las áreas que dirigirá el partido de Santiago Abascal.
“Reclamaremos y exigiremos ser Capital Verde Europea porque corremos el peligro de ser una capital gris en movilidad, sostenibilidad y temas medioambientales” ha concluido el dirigente valencianista.
“Reparto de sillones”
Por su parte, la portavoz socialista, Sandra Gómez, ha señalado que este pacto es “un triunfo de Vox“, ya que en las últimas semanas el grupo municipal ha estado “apretando públicamente” a la alcaldesa, que asegura “se ha tenido que tragar sus palabras de gobernar en minoría”. En este sentido ha afirmado que Catalá ha “claudicado” ante Vox y ha “pegado cobotà” para hacer “un pacto de reparto de sillones“.
“Hasta en les Corts Valencianes se hizo un pacto con una servilleta, pero al menos había servilletas, aquí no hay nada. Aquí lo que ha habido es un reparto de sillones del que no conocemos la letra pequeña“, ha criticado la dirigente socialista en declaraciones a los medios a las puertas del Salón de Cristal al impedirles realizarlas dentro donde se ha anunciado el pacto. “La derecha siempre que gobierna se piensa que la institución es suya”, ha lamentado.
Del mismo modo, Gómez ha lamentado que se haya “troceado” el Ayuntamiento y el gobierno municipal con una “distribución absolutamente ineficiente” de las competencias, y hayan cedido “delegaciones estratégicas” a Vox para “aplicar políticas negacionistas”.
“El grupo negacionista va a llevar cuestiones tan importantes como la Albufera de València, a los negacionistas de la violencia de género les ha entregado Familia para que invisibilicen a las familias monoparentales o LGTBI”, ha indicado la portavoz, que también ha alertado que cuestiones como la Capital Verde Europea o los Gay Games están “en peligro”.
