La cooperativa valenciana Consum, en su 50 aniversario, prevé cerrar 2025 con más de 5.000 millones de euros en ventas y un resultado de récord. El objetivo llega tras un ejercicio de crecimiento sostenido y con la vista puesta en consolidar su posición en el gran consumo.
En 2024, Consum cerró con un resultado positivo de 108,7 millones de euros, un 7,5 % más, abrió 59 supermercados y sumó 653 puestos de trabajo. Estos hitos refuerzan la base operativa desde la que la compañía proyecta el salto de 2025, impulsada principalmente por el volumen, lo que indica que el avance no depende solo de los precios, sino de atraer más cestas y tráfico a tienda.
En unas jornadas sectoriales en València, la dirección expuso su hoja de ruta y subrayó que la evolución está siendo buena y que la empresa crece mucho más que el mercado. El mensaje acompasa un contexto en el que, pese a la falta de sincronía entre la macro y la microeconomía, los hábitos de compra se mantienen estables, con visitas frecuentes y un peso notable de la marca de distribuidor para controlar el presupuesto.
Aperturas, logística y canal online
Para este año, el plan pasa por abrir 35 tiendas franquiciadas netas y 18 propias. En paralelo, la cooperativa avanza en una nueva plataforma logística destinada a acelerar el comercio online, un canal en el que los resultados actuales son poco satisfactorios. La instalación, según sus planes, estará lista en septiembre de 2026, con el objetivo de ganar eficiencia, ampliar la cobertura y mejorar el servicio en un segmento que exige rapidez y disponibilidad.
En materia de crecimiento inorgánico, Consum se muestra abierta a estudiar oportunidades, aunque con un enfoque más selectivo. La búsqueda se centra en superficies de un modelo similar y ubicaciones que encajen con su red, de manera que las posibles integraciones aporten sin distorsionar el formato de proximidad que la cadena prioriza.
La combinación de marcas también marca el paso en los lineales. Aunque la marca de distribuidor mantiene un gran peso por su capacidad de ajustar el gasto, en sus tiendas la marca de fabricante está mostrando un mejor comportamiento. Esta convivencia permite a la enseña cubrir perfiles de cliente distintos y sostener el mix de margen y rotación.
Tienda física, autocobro y gestión en episodios de alerta
La compañía está desplegando cajas de autocobro, especialmente útiles en modelos de proximidad con cajas pequeñas, y ya operan en 20 tiendas. El objetivo no es sustituir la atención personal, que la empresa considera diferencial, sino agilizar el paso por caja y adaptar la experiencia a momentos de mayor afluencia.
Otro eje de gestión es el protocolo ante episodios meteorológicos severos. Cuando se decreta alerta roja, Consum cierra la actividad en tiendas y plataformas para priorizar la seguridad. La medida, muy bien valorada internamente, evita desplazamientos innecesarios de plantilla y clientes; en ocasiones se han llegado a cerrar 185 tiendas en un mismo día, lo que evidencia la firmeza del criterio.
De cara a la campaña navideña, las expectativas son de un periodo muy bueno, con especial atención a una zona en la que el año pasado estaban quitando barro. La comparación sugiere un entorno más favorable para el consumo en esas áreas, con una demanda que debería normalizarse respecto al ejercicio anterior.
Con estos vectores —expansión de la red, mejora logística, optimización del online y una propuesta de tienda centrada en la proximidad— la cooperativa confía en cerrar 2025 por encima de los 5.000 millones de euros en ventas y con resultados de récord, alineando su 50 aniversario con un nuevo techo en su trayectoria.
