La reforma del sistema de financiación de la Comunitat Valenciana, la condena a la violencia machista y los futuros pactos de gobierno han protagonizado los momentos más tensos de El debate, 23J en clave valenciana, que ha celebrado À Punt Mèdia este martes por la noche con los candidatos y candidatas a las elecciones generales del 23 de julio. Moderado por los periodistas Marta Ventura y Mathies Muñoz, Diana Morant (PSPV-PSOE), Belén Hoyo (Partido Popular), Águeda Micó (Compromiso-Sumar) y Carlos Flores (Vox), se cruzaron acusaciones con un tono dialogante, en un debate que ha estado marcado por la agenda nacional y donde se han escuchado menos propuestas en clave valenciana.
Uno de los momentos claves se ha vivido al inicio del tercer bloque, donde Morant se ha dirigido a los espectadores para recordar la condena de Flores en 2002 por violencia de género contra su ex esposa y su participación en las negociaciones con los populares para formar gobierno en la Comunitat Valenciana. “Cambiaron los principios por sillas […]. El PP se ha hecho ultra, ha comprado los discursos de Vox y eso los perseguirá siempre”, ha sentenciado. Unas declaraciones que el candidato del partido de extrema derecha ha sorteado, para después acusar a la también ministra de Ciencia e Innovación, de hacer un “ejercicio de demagogia ilícito”. Flores ha explicado esta crítica en que Morant, según ha apuntado, se gastó 17.874 euros en la reforma de su despacho y más de 200.000 euros en un “palacete” en Madrid.
“El PP no acepta ninguna lección de igualdad del PSPV ni de Compromís-Sumar”, ha asegurado Hoyo que, en sintonía con el resto de candidatos populares en la cámara baja, ha hablado de la ley del “sólo sí es sí”, para reprochar a las formaciones que han “permitido que un centenar de violadores salgan a la calle y cerca de un millar reduzcan las condenas mientras, -ha apostillado- Morant se divertía con sus compañeras y Micó participaba en el baile de la vergüenza con Oltra”. Sin embargo, la candidata de Compromís-Sumar no ha tardado en defender las políticas de la exvicepresidenta de la Generalitat en materia de igualdad, como la equiparación de las víctimas de la violencia machista con las víctimas del terrorismo. “Estoy muy orgullosa de todo lo que ha hecho Oltra y debería aprender de su buen trabajo”, ha añadido.
La responsabilidad sobre la reforma de la financiación en el territorio valenciano de acuerdo con su peso poblacional ha confrontado a todos los candidatos entre sí, con un enfoque claramente nacional. Morant y Hoyo han centrado los intercambios de reproches directos al presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, y al candidato a la presidencia popular, Alberto Núñez Feijóo. La número dos en el Congreso por Valencia ha cargado que Sánchez ha marginado a los valencianos y valencianas, convertirlos en “ciudadanos de segunda”, eligiendo como socios “los independentistas catalanes y los herederos de ETA” y no el pueblo valenciano. A las acusaciones respondió la ministra de Ciencia e Innovación, que aseguró que el principal “adversario” que tiene España se encuentra en Génova. “Lo único que financió el PP fue la corrupción […] Ustedes no tienen ninguna credibilidad”.
Unas intervenciones que Micó ha aprovechado para añadir que los diputados y diputadas valencianos, “tanto del PP como del PSPV”, cuando acuden al Congreso, “hacen más caso a Génova ya Ferraz, y se olvidan de quien los votó”. La candidata de Compromís-Sumar ha valorado que su formación es “la única” que defiende los intereses de los valencianos y las valencianas. En cuanto a Flores, ha centrado su intervención en defender que su partido es “el único” que apuesta por fortalecer un estado “más descentralizado” y, por tanto, ha dicho, “más debilidad”. Así, propone una reducción “drástica” del gasto público, una revisión “sistemática” de la administración y una “racionalización” de las instituciones.
Los reproches han ido en aumento en el último bloque, al ser preguntados por los posibles pactos de gobierno. Mientras que las candidatas del PSPV-PSOE y Compromís-Sumar han cuestionado la “credibilidad” de los populares para pactar con los de extrema derecha en la Comunitat Valenciana, los portavoces de Vox y el PP han cargado contra Sánchez por ser un “mentiroso compulsivo” ”. Micó ha hablado de la cancelación de la suscripción a las revistas en valenciano en Burriana o la eliminación del nombre del cantante de Al Tall para el auditorio de Torrent, para después remarcar que “la lengua no es una ideología ” y que “la cultura de los valencianos y las valencianas no es ideología”. A lo que Flores ha respondido que “desafortunadamente” la lengua y la cultura “sí se usan políticamente”,
En clave nacional, Hoyo ha centrado su intervención en acusaciones al presidente del gobierno español, afirmando que ha “puesto en peligro” la separación de poderes en organismos como el Tribunal Constitucional, el CIS o Correos, y que “no ha tenido problemas por a pactar con proetarras e independentistas que quieren romper España”. A su vez, Morant ha hablado de Vox como un “peligro para la democracia” y se ha vuelto a dirigir a Feijóo, para que dé explicaciones por su relación con el narcotraficante Marcial Dorado. “Imaginan a un candidato a la presidencia con este currículo”, ha añadido.
