El Ayuntamiento de València ha decidido finalmente mantener el túnel de Peréz Galdós pese a que ya se había comprometido a suprimirlo tal y como habían exigido los vecinos y vecinas de la zona en varias protestas en las que pedían enterrar este túnel por los altos niveles de contaminación acústica y atmosférica. Ahora, el gobierno municipal tras varios estudios técnicos ha determinado que esta infraestructura por la que pasan más de 60.000 coches diarios siga “de momento” en uso.
El concejal de Urbanismo, Juan Giner, y el concejal de Movilidad y Seguridad, Jesús Carbonell, han explicado este miércoles en rueda de prensa que este “aplazamiento” viene motivado por los altos costes y los largos plazos de ejecución que conllevaría esta obra, que incluso podría suponer la pérdida de los fondos europeos asignados a la reanaturalización de esta artería de la capital.
“Tras los informes de los expertos de la universidad y la empresa redactora del proyecto, hemos adoptado la decisión de posponer la eliminación del túnel. No renunciamos a eliminarlo, pero debe marcarse en otro proyecto viable al margen de la financiación de estos fondos” ha señalado el concejal de Urbanismo.
En este sentido, Giner ha explicado que estos estudios, realizados por la empresa adjudicataria del concurso de ideas y redacción del proyecto en colaboración con ingenieros civiles de la UPV, habían planteado dos opciones para acometer esta “promesa”, aunque se han descartado, ya que resultan “inviables” por sus largos plazos y la elevada inversión que añadiría un sobrecoste cercano a los 19 millones de euros al proyecto.
La primera alternativa proponía realizar un estudio “riguroso de soluciones” para cubrir el paso inferior, que implicaría una campaña de ensayos y un análisis estructural del estado del túnel que se hizo hace más de 65 años. Ello, haría “inviable” cumplir los plazos de ejecución marcados por los Next Generation.
La otra opción que se barajaba era “establecer una solución estructural alternativa“, es decir, colocar una estructura en el interior del túnel para mantenerlo que está valorada en 19 millones de euros, que se debería sumar a los 21 millones de euros que costaría la actual reurbanización de Peréz Galdós. “Tanto por el importe como por el plazo de ejecución tampoco cumpliríamos con los plazos establecidos por la Unión Europea”, ha indicado Giner.
“Seguridad”
Por otro lado, el concejal de Movilidad ha indicado que, de acuerdo con los informes de la UPV y de la empresa redactora del proyecto, “existe una serie de necesidades adicionales vinculadas a la seguridad” que el gobierno va a cometer y que supondrá “un sobrecoste elevadíssimo” al presupuesto inicialmente contemplado. En este sentido, ha explicado que que los fondos Next Generation financiaban 8,8 millones del proyecto, a los cuales había que añadir un 10% de fondos propios del Ayuntamiento, más el IVA correspondiente, que también abonaba el consistorio.
En total, 11,8 millones de euros era el importe inicial al que ahora hay que sumar el coste de estas medidas de seguridad como la sustitución de la losa sobre el colector de cierre, 2 millones de euros; una “infraestimación” de los costes de urbanización por 3,6 millones de euros; y la mejora sustancial del alcantarillado por 2,6 millones de euros. Todo ello, junto con el IVA, asciende a 9,9 millones de euros que “hace inviable cubrir el túnel en el momento actual“. La inversión total rozará los 22 millones de euros.
“Cuando los informes de seguridad hablan, los políticos callan, o al menos los que son responsables y prudentes. Y eso es lo que el actual gobierno” ha indicado el titular de Movilidad, que también ha cargado contra la “irresponsabilidad, incompetencia e insensatez mayúscula” del anterior equipo de gobierno municipal que solicitó fondos europeos con “proyectos inmaduros” e “improvisación” y “jugaron con las expectativas de los vecinos”.
El responsable de Movilidad también ha recalcado que, a pesar de que no se cubra el túnel, se va a hacer “un esfuerzo importante por renaturalizar la vía, por lo que los vecinos se van a beneficiar de mejoras muy sustantivas que, además, cumplirán con la memoria presentada a Europa”.
Dos carriles por sentido
Así pues, el proyecto de reurbanización de Peréz Galdós seguirá adelante pero manteniendo el túnel e incorporando algunas modificaciones a la planta viaria planteada en un primer momento, cuestión que aseguran “no ponen en peligro la llegada de los fondos europeos” porque están “absolutamente justificadas desde el punto de vista técnico”.
La nueva idea elimina el carril exclusivo para el transporte público dejando dos carriles por sentido para vehículo privado para así poder ampliar las aceras y que lleguen hasta los 6 metros por donde no discurra el carril bici -que será unidireccional y 1,5 metros de ancho- y algo menos por dónde sí haya este paso para bicicletas. También se incorporarán “mejoras acústicas” para reducir el ruido que provoca el paso inferior.
“Entendemos que con todas estas mejoras se cubren las expectativas de los vecinos, a excepción, claro está, de la cubrición del túnel que ya hemos dicho que es inviable, por lo menos en el momento actual”, ha defendido el concejal, que también ha manifestado que la vía tiene unos 2 kilómetros de longitud y el paso de inferior cerca de 700 metros, por lo que “habrá vecinos que efectivamente se vean perjudicados por la no eliminación del túnel, pero hay muchos otros, que se van a beneficiados con una reurbanización y renaturalización de la vía muy importante”.
