Ante las inminentes elecciones generales en España, previstas para mañana, 23 de julio, surge una pregunta interesante entre los ciudadanos: ¿Qué ocurriría si eres el primero en llegar a votar en tu centro electoral y no hay nadie en tu mesa electoral? Esta es una situación poco común que plantea ciertos interrogantes, y es fundamental abordarla para mantener a los votantes informados.
A tan solo un día de que los centros electorales abran sus puertas para dar lugar al sufragio, la democracia hace un llamado a los ciudadanos españoles a ejercer su derecho al voto. Estas elecciones generales anticipadas, decididas por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, han creado cierta controversia, ya que el día de votación coincide con la temporada de verano, una época en la que muchos españoles suelen estar de vacaciones.
El choque entre la fecha electoral y los planes de vacaciones ha llevado a muchos ciudadanos a buscar alternativas para ejercer su derecho al voto sin interrumpir sus vacaciones. Como resultado, las oficinas de Correos han estado abarrotadas de solicitudes para votar por correo, y las Juntas Electorales han recibido un sinfín de excusas de aquellos que prefieren evitar la responsabilidad de formar parte de las mesas electorales.
Para designar a los miembros de las mesas electorales, se llevaron a cabo sorteos entre los días 24 y 28 de junio, acorde con la Ley Electoral que especifica que esta selección debe realizarse entre 25 y 29 días después de la convocatoria de las elecciones. Aun así, de forma excepcional, la Junta Central ha permitido que algunas ciudades adelantasen este procedimiento al 22 de junio.
Cuando los miembros designados de la mesa electoral no asisten: el plan de contingencia
Hay un protocolo específico para cuando los titulares y suplentes de las mesas electorales no están presentes. Si el presidente de la mesa no puede asistir, su primer suplente toma el mando. Si este tampoco está presente, lo hace el segundo suplente. En el caso de que ninguno de los tres asista, el primer vocal asume el cargo de presidente. De manera similar, si un vocal no puede asistir, sus suplentes correspondientes asumen su rol. Si por alguna razón, ninguna de las personas notificadas se presenta el día de las elecciones, los primeros votantes que lleguen al centro electoral asumirán las responsabilidades de los titulares.
Después de recibir las notificaciones en sus hogares, muchos de los seleccionados para ser miembros de la mesa electoral han presentado alegaciones para excusarse de esta obligación. Aunque las personas mayores de 65 años, aquellas con discapacidades y las mujeres embarazadas en su tercer trimestre de gestación están exentas de esta responsabilidad, las Juntas Electorales han mostrado una mayor flexibilidad este año, permitiendo que aquellos que ya tenían reservadas y pagadas sus vacaciones, o para quienes el servir en la mesa supondría una pérdida financiera, se excusaran de esta obligación.
Varias Juntas Electorales, han recibido una avalancha de excusas para evitar la obligación de servir en las mesas electorales. La excusa más comúnmente citada ha sido la programación de vacaciones, que en la mayoría de los casos estaba perfectamente documentada y justificada. Este fenómeno ha llevado a que muchas mesas aún no se hayan conformado completamente debido a la falta de personas para completarlas.
El proceso de formación de la mesa electoral: paso a paso
Según la Ley Electoral, las mesas electorales se forman mediante un sorteo entre los nombres del censo de cada área. De este sorteo emergen nueve nombres para cada mesa electoral: un presidente, dos vocales y seis suplentes. Si uno de los titulares, ya sea el presidente o los vocales, renuncia al cargo, su suplente toma el relevo. Para ser presidente, es necesario poseer un título de Bachillerato, Formación Profesional de segundo grado o el Graduado Escolar. Cada mesa será conformada a las 8 de la mañana del 23 de julio, una vez confirmado que todos los citados están presentes.
