La Coordinadora de los Barrios de Valencia aplaude la sentencia del Tribunal Superior de Justicia, que ha declarado nulos los límites a la autorización a nuevos locales de ocio en la ordenanza contra el ruido de València. De hecho, valora positivamente que la justicia cuestione las medidas de la administración para luchar contra la contaminación acústica basadas en restricciones a la hostelería.
La coordinadora considera que la limitación de la implantación de empresas hosteleras en toda la ciudad, utilizando como excusa el problema del ruido, es una medida injusta y desproporcionada que estigmatiza la actividad del ocio y la hostelería.
Asegura que el Ayuntamiento de Valencia cuenta con herramientas urbanísticas para adoptar limitaciones a la implantación de nuevas empresas en aquellas zonas donde pueda hacer falta, pero recalca “que no tenía sentido implantar una medida tan desproporcionada en toda la ciudad”.
Por ello, desde la Coordinadora, aseguran, “compartimos y agradecemos la sentencia del TSJ que abre la puerta a hacer un análisis riguroso sobre las verdaderas causas del ruido en la ciudad y la necesidad de abordar planes de medidas preventivas y eficaces contra el ruido en lugar de la permanente actuación contra la hostelería.
Este fallo judicial, señala la Coordinadora, avala sus reivindicaciones sobre la necesidad de cambiar el modelo de lucha contra el ruido, que pasa también por superar el modelo de las Zonas Acústicamente Saturadas (ZAS).
De la misma forma, el colectivo hostelero considera que esta sentencia es una oportunidad para que el nuevo Ayuntamiento mantenga y apueste por los planes de medidas de prevención contra la contaminación acústica en la línea de lo aprobado y anunciados el pasado mes de junio en Junta Local de Gobierno, que cuenta con el respaldo de los hosteleros.