La huelga de la Inspección Técnica de Vehículos (ITV), iniciadas hace dos semanas en Alicante, ha llegado este martes a las estaciones de toda la Comunitat Valenciana, con un “seguimiento mayoritario” y sin incidentes, para reclamar a la administración la homogeneización salarial de la plantilla, según han explicado a Europa Press desde los sindicatos convocantes.
La autoridad laboral ha fijado unos servicios mínimos del 40 por ciento para este paro de 24 horas, en el que se atienden principalmente inspecciones de vehículos de emergencias, ambulancias, policiales, los que tienen que pasar por segunda inspección y los que tienen la ITV caducada. CCOO PV y UGT PV han impugnado este porcentaje de servicios obligatorios al considerarlo “abusivo”.
La huelga, que arrancó el día 12 de febrero en la provincia de Alicante y que este martes estaba convocada para el resto de la Comunitat, se ha secundado en la práctica totalidad de las estaciones durante el turno de mañana, según han coincidido los sindicatos, que esperan que por la tarde se siga la misma tónica.
De acuerdo a la Conselleria de Industria, de la que depende la empresa pública Sitval que gestiona las estaciones, la jornada transcurre sin incidentes y ha tenido seguimiento en diez de las once estaciones de Alicante, en dos de las tres que hay en Castellón y en el 45% de las de Valencia.
“Incumplimiento del acuerdo de homogeneización”
Los sindicatos denuncian el incumplimiento del acuerdo de homogeneización que han firmado ya en dos ocasiones, primero con el Botànic y después con el actual Consell, para equiparar los sueldos de todos los trabajadores de las estaciones tras la reversión pública, ya que antes estaban sujetos a ocho convenios diferentes. El personal de Alicante percibe un 40% menos de salario que sus homólogos de otras estaciones.
El responsable del sector de la Administración Autonómica FSC CCOO PV, Pepe Cloquell, ha explicado que se esperaba percibir el complemento de homogeneización salarial acordado en la nómina de enero, con carácter retroactivo desde junio, pero ha llegado ya la mensualidad de febrero y aún no se ha embolsado.
Por ello, ha señalado que seguirán las movilizaciones con huelgas de 24 horas el 12 y 28 de marzo de marzo. “Nuestro deseo es que esto se solucione antes y no tengamos que llegar a hacerlas efectivas”, pero no hay nuevas reuniones previstas con la administración. El responsable de CCOO ha señalado que estas acciones de enmarcan en la negociación de un convenio colectivo único en la empresa, por lo que “todo el personal se siente afectado”.
En el mismo sentido se ha pronunciado la secretaria de Acción Sindical e Igualdad de UGT FICA PV, Rosa Benítez, que añade que entre la plantilla no afectada por el complemento hay “indignación” por el incumplimiento de la administración, por si “en cualquier acuerdo en el futuro se van a encontrar en la misma situación”. De ahí el seguimiento entre los compañeros para reclamar la equiparación de los trabajadores de Alicante.
Rosa Benítez ha subrayado que el acuerdo de equiparación salarial obedece al “derecho básico de que a igual trabajo, igual salario”, y ha defendido su validez. “La Abogacía de la Generalitat dice que, si se subsanan requerimientos, es válido”, ha remarcado, antes de criticar que Hacienda y Servicio Público estén requiriendo más información sobre los convenios, “que son públicos y publicados”, y los salarios de 2022.
Esta demora, ha señalado, deja a la plantilla en “absoluta desprotección”. “Están jugando con mil personas trabajadoras pendientes de esto y casi 400 familias en Alicante” y es además “una falta de respeto primero a ese informe de la Abogacía y después a la legislación básica administrativa”, ha aseverado.
Desde Intersindical Valenciana han reclamado una “negociación urgente de un convenio único que equipare las condiciones de todo el personal de Sitval“. Esta organización ha denunciado que “la Mesa de negociación se encuentra parada por voluntad política desde la anterior legislatura”.
“Este problema se ve agravado con la falta de personal en las estaciones y la falta de sustituciones, lo que está perjudicando el servicio prácticamente en la totalidad de las estaciones. El personal no es moneda de cambio para la consellera, llevamos esperando más de seis meses con promesas incumplidas y excusas de todo tipo que han llevado a esta negociación a un punto muerto”, ha lamentado.
