La Delegación en la Comunitat Valenciana de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) denuncia las “enormes dificultades que tienen los residentes en este municipio para alquilar una vivienda con motivo de las constantes subidas de precios“.
Según datos de precios de oferta del portal Idealista, los que encuentran los ciudadanos en sus búsquedas de piso, el incremento del precio de alquiler en la capital valenciana en los últimos 12 meses ha sido del 22%, frente al 9,5% de la media nacional. Lamentablemente, no es algo puntual: la subida en los últimos 5 años fue del 52%, frente al 20% de la media nacional.
Según datos de la Organización de Consumidores y Usuarios, publicados en la revista especializada OCU fincas y casas en base a un estudio de precios en 53 zonas de la capital, para un piso tipo de 90 m2 los alquileres de pisos más caros están en las zonas de La Roqueta, La Xerea, Ciudad de les Arts i de les Ciencias, El Mercat y El Carme.
En contraste, los alquileres más baratos -con una diferencia del 50% respecto de los más caros- se encuentran en Els Orriols, Torrefiel, El Calvari, Marxalenes y Tres Forques.
En busca de una solución duradera a este problema, OCU Comunidad Valenciana exige “más hechos y menos discursos para contribuir a abaratar el alquiler y hacer la vivienda más accesible“.
Propuestas
- Un compromiso firme del Ayuntamiento y la Generalitat durante la presente legislatura para la ampliación del parque público de vivienda en alquiler (vivienda social), tanto en Valencia capital como en los municipios aledaños, a través de la firma de un documento público que cifre el número de viviendas comprometidas.
- La agilización por parte de la Generalitat en la concesión anual de ayudas para el alquiler de jóvenes.
- La dotación de medios a la Justicia y a los Servicios sociales para agilizar la resolución de conflictos ligados al alquiler y a la reubicación de familias especialmente vulnerables. Solo proporcionando seguridad jurídica a ambas partes se podrá impulsar la oferta de pisos en alquiler y equilibrar los precios, atrayendo las viviendas vacías y las que se destinan a otros usos.
- La dotación de medios a la Oficina de Vivienda de la Generalitat para que pueda prestar servicios de asesoramiento y mediación voluntaria a las partes, con el fin de desjudicializar los conflictos ligados con el alquiler y agilizar su resolución. Por su parte, las oficinas de Consumo deben jugar su rol en las relaciones donde el arrendador sea un profesional o una sociedad.
- Descentralizar servicios fuera de Valencia capital, en busca de una distribución más equilibrada de la población. Y que se faciliten trámites a las empresas privadas que deseen hacer lo mismo, con el fin de evitar la concentración de población en determinados municipios.
- En el mismo sentido de equilibrar el uso del territorio, dentro de las respectivas competencias territoriales, pide que se revisen los apoyos al teletrabajo y al transporte interurbano.
El problema del alquiler no depende exclusivamente de una administración (estatal, autonómica o municipal) pero OCU exige que “cada una asuma su responsabilidad sin excusar su inactividad en el marco competencial“.
