Los 264 ayuntamientos beneficiarios del Pla Obert d’Inversions de la Diputació de València pueden presentar desde este viernes sus proyectos en el marco del principal programa inversor de la corporación provincial, con una asignación que alcanza los 340 millones de euros para los municipios y otros 10 millones para las mancomunidades.
Los consistorios podrán presentar sus solicitudes en cualquier momento, y la Diputación que preside Vicent Mompó habilitará distintas convocatorias a lo largo del año para aprobarlas.
El BOP publicó este jueves el anuncio de un plan que se aprobó en el pleno provincial con seis meses de antelación respecto al último Plan de Inversiones de la anterior legislatura, con un nivel de ejecución ligeramente superior al 10%.
En respuesta a estos problemas con los que se han encontrado los ayuntamientos para concretar y ejecutar las obras, “la principal novedad del Pla Obert es que se convoca a cuatro años para facilitar el proceso a los alcaldes y alcaldesas, que tienen tiempo más que suficiente para madurar y definir sus necesidades, presentar y convertir en realidad los proyectos”, explica la vicepresidenta y diputada de Cooperación, Natàlia Enguix.
En este sentido, Enguix destaca que “hemos cumplido la palabra que dimos a los responsables locales de que a principios de enero sabrían su asignación en el plan, y de que en la primera mitad del año podrían empezar a presentar ya los proyectos”.
No obstante, “la apertura del plazo de presentación tras la publicación del programa en el BOP no significa que los ayuntamientos se tengan que sentir presionados, pues la esencia del plan es justamente lo contrario, disponer de tiempo suficiente por delante para pensar bien los proyectos y que cuando se presenten reúnan todos los requisitos para salir adelante y transformarse en mejoras reales para los pueblos y ciudades”.
Mejorar la ejecución
La responsable de Cooperación Municipal insiste en que con el Pla Obert “todos los municipios salen beneficiados, ya que la dotación se ha incrementado en un 20%, y los pocos que reciben menos asignación que la pasada legislatura la verán compensada con un plan de núcleos para pueblos con aldeas en el que estamos trabajando”.
Con todo, Natàlia Enguix insiste en que, más allá de las cifras, “la prioridad es incrementar considerablemente los niveles de ejecución para que los ayuntamientos no tengan que renunciar a ayudas ni devolver un solo euro a la Diputación”.
El Pla Obert modifica ligeramente la fórmula de reparto, con mayor peso de la población respecto a la superficie, incorpora la habitual discriminación positiva en favor de los municipios pequeños e incentiva actuaciones como la mejora del ciclo integral del agua, las zonas verdes e instalaciones deportivas, y los proyectos arriesgados y transformadores para los municipios, entre ellos los de urbanismo con perspectiva de género. También se ha tenido en cuenta la pertenencia a la Red de Municipios Protegidos contra la Violencia de Género de la Diputación.
