Los vecinos y vecinas de Zaidía, en València, han impulsado una campaña contra la turistificación de sufre este distrito y que culminará el próximo 24 de febrero con una manifestación. Estas movilizaciones llegan tras la concesión de una nueva licencia hotelera en la zona, “la gota que ha colmado el vaso”, y que junto al disparo de apartamentos turísticos están “tensado la situación” en estos barrios.
Se trata de un hotel de apartamentos con aforo de 500 personas, ubicado en una manzana entre las calles Maximilià Thous y Benipeixcar, y cuya construcción está previsto que se inicie en breve. Un nuevo proyecto que se suma al del macrohotel de 575 habitaciones de las naves de Guatla, de momento paralizado, y que rechazan tanto los colectivos vecinales como el propio Ayuntamiento que quiere destinar este espacio a dotaciones municipales.
A estas infraestructuras se une la proliferación de apartamentos turísticos por todo el distrito, mucho de ellos ilegales, que se han incrementado un 30% en los últimos años, sin contar la oferta ilegal que “se multiplica semana a semana”. Un problema que está dificultando el acceso a la vivienda y “amenazando al tejido social de los barrios”, según denuncian en un comunicado las entidades convocantes de la campaña de protestas (Saïdia Comuna y las asociaciones de vecinos de Sant Antoni-la Saïdia, la Saïdia y Morvedre junto al apoyo de Entrebarris).
300 euros más
De hecho, según los datos difundidos por los vecinos extraídos de los principales portales inmobiliarios, alquilar un piso en la Zaidía cuesta 300 euros más de media que en 2021, un aumento del 50 % en solo tres años. “Mientras la turistificación avanza vorazmente, muchos vecinos tienen que abandonar el distrito porque no pueden costear el acceso a una vivienda. Y mientras tanto, ni la Generalitat Valenciana ni el Ayuntamiento de València ponen suelo a disposición de la construcción de vivienda pública y protegida en la Zaidía” señalan los colectivos vecinales.
Del mismo modo, los organizadores de la manifestación, que se llevará a cabo bajo el lema ‘Vecindario sí, turistificación no’, han apuntado también que “el aumento de la población flotante en el distrito implica problemas de ruido y suciedad, además de la saturación de servicios públicos”. Además, alertan de que “la turistificación va acompañada de un proceso de cambio en la demanda comercial que pone en peligro el comercio tradicional y de proximidad y fomenta otro tipo de establecimientos”.
“Permitir que avance la turistificación sin tomar ninguna medida al respecto supone priorizar el interés económico de unos pocos frente a las necesidades de los vecinos de la zona” denuncian las entidades del barrio.
Más actividades protesta
Por otro lado, estas entidades también han programado otras actividades dentro de la campaña de movilización. Este mismo sábado se celebró un concierto contra la turistificación en la asociación cultural La Protectora, con la actuación de los grupos Las Víctimas Civiles, O.J.O. y Los Malditos, que agotaron las entradas.
Además, para el 15 de febrero se ha organizado la presentación del libro L’últim Recer, de Nacho Collado, en la librería Nöstlinger, en el que aborda la problemática en torno a la vivienda a partir de distintos casos reales ocurridos en la ciudad de València. Unos días después, el día 18 de febrero, se celebrará en el parque de Marxalenes un taller de pancartas, abierto al público familiar del distrito, que servirá como a preparativo para la manifestación. Finalmente, el día 28 de febrero, como cada último miércoles de mes, se llevará a cabo una cacerolada antituristificación desde la calle Guatla.
