El I Pacto del Agua por l’Albufera, firmado este martes en el Palau de la Generalitat, hará posible que el lago reciba de los regantes del río Júcar y de los del río Turia 24,3 hectómetros cúbicos de agua al año entre 2025 y 2027, una cantidad que supone 12,9 hectómetros más en total que lo estipulado en el Plan Hidrológico.
Este es un acuerdo considerado «histórico» para «la conservación y defensa» del parque natural de l’Albufera de València, como han señalado todos los firmantes: el jefe del Consell, Carlos Mazón; la alcaldesa de la capital valenciana, María José Catalá, y los representantes de las comunidades y acequias del Júcar y del Turia.
El pacto consta de dos partes, un primer acuerdo suscrito con los regantes del Júcar, para que sea posible garantizar la llegada al lago de 11 hectómetros cúbicos de este sistema en época previa al cultivo de arroz –en el periodo comprendido entre el 15 de octubre y el 15 de mayo— «para recuperar l’Albufera de los efectos de la Dana», y un segundo con los del Turia, para garantizar la llegada a este espacio natural de 13,3 hectómetros cúbicos de ese sistema, en la misma época y con el mismo fin.
Además, en ambos casos se establece que la Generalitat y el Ayuntamiento de València se comprometen a realizar las actuaciones necesarias para «desistir» de los contenciosos-administrativos interpuestos contra la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) en relación a la aplicación del artículo 13 del Plan Hidrológico del Júcar» por las aportaciones de agua establecidas para el lago.
Carlos Mazón ha asegurado que el I Pacto del Agua por l’Albufera es una muestra de «exigencia, responsabilidad y generosidad». «Exigencia», ha dicho, para seguir reivindicando el cumplimiento del plan de cuenta de l’Albufera y el agua que requiere; «responsabilidad» por no quedarse «con los brazos cruzados esperando una solución de fuera» para este ecosistema y adoptar medidas para «resolver un problema histórico»; y «generosidad» porque cada parte ha tenido que «renunciar, ceder un poco, en favor de un gran beneficio colectivo.
«Hoy estamos haciendo historia, hoy l’Albufera tiene años por delante», ha dicho el responsable autonómico, que ha agregado que se ha demostrado que las cuestiones del agua «se pueden solucionar de manera pacífica».
La alcaldesa de València ha celebrado el «consenso» alcanzado y el «trabajo de muchas personas» para conseguirlo. «Hoy no es un día cualquiera, es un día histórico para l’Albufera y para València», ha aseverado María José Catalá, al tiempo que ha agradecido el «compromiso» y la «valentía» del «presidente de la Generalitat y de la Generalitat» en conjunto «en favor» de este paraje «frente a la inacción del Gobierno» central «y de la CHJ».
María José Catalá ha asegurado que “l’Albufera no solo es uno de los humedales más valiosos de nuestro país, no es solo un motor económico de uno de los sectores más productivos y más ligados a nuestra tierra, es nuestra alma, el punto de encuentro físico y emocional de València y del área metropolitana que ha sido golpeada por la dana”. Para Catalá, “como el lago ha sufrido el golpe de la dana, la recuperación es vital y tiene que ser también un símbolo de la reconstrucción”. En este sentido, la alcaldesa ha añadido que “desde el Ayuntamiento hemos destinado 8,7 millones de euros para una limpieza urgente y exhaustiva de la laguna y, a partir de ahora, centraremos los esfuerzos en mejorar la calidad del agua y garantizar un caudal suficiente”.
La alcaldesa ha recordado el pacto alcanzado en el mes de septiembre entre todos los municipios ribereños de l’Albufera para pedir la declaración del lago como reserva de la biosfera de la UNESCO y lo ha calificado como “respuesta política a un consenso generalizado en el seno de la sociedad valenciana al creer que es el momento de l’’Albufera y que, por encima de ideologías, somos capaces de acordar y tejer consensos desde la generosidad y el compromiso”.
Por último, la alcaldesa ha agradecido el apoyo de la Generalitat “por la valentía y el compromiso, porque la Generalitat sí apuesta, sí quiere y sí se compromete con l’Albufera y con València ante la inacción y omisión del gobierno central y de la Confederación Hidrográfica del Júcar”. María José Catalá también ha dado las gracias a las comunidades de regantes por “la tarea diaria, que es una muestra de generosidad, de compromiso con la tierra y de responsabilidad puesto que ellos conocen el agua como nadie, la cultivan, la respetan y la hacen posible y hoy, además, dan un ejemplo de altura de miras, de entender que esta es una cuestión de Estado y de lo que siempre hace la sociedad civil de esta tierra cuando la necesitamos: empujar, colaborar y comprometerse. Y nos ceden lo más valioso que tienen, el agua, para ayudar a recuperar l’Albufera”.