El pleno del Ayuntamiento de València ha dado luz verde, con los votos de PP y Vox, al cambio de gestión directa del PAI del sector del Grau, que deja en manos de los propietarios del suelo el desarrollo urbanístico de esta zona que supondrá una inversión de 120 millones de euros y con la que el gobierno municipal defiende se construirán 2.500 viviendas.
Durante el debate, el concejal de Urbanismo, Juan Giner, ha explicado que “una de las prioridades más urgentes y determinantes para este gobierno es la vivienda” y, por ello, “trabajamos a corto y a medio plazo”.
“A corto, con la activación de los solares de vivienda pública propiedad municipal, no los de AUMSA, mediante la colaboración público-privada para incrementar el número de viviendas de protección pública en nuestra ciudad” y a medio plazo “estamos impulsando los dos sectores de suelo urbanizable pendientes de desarrollar como son Benimaclet y Grau”, ha indicado.
“No lamentamos el pasado, aprendemos. Trabajamos con intensidad y nos dejamos la piel en el presente para tener un mejor futuro que pasa por la necesidad de crear vivienda” ha asegurado el también concejal de Vivienda, que ha defendido el cambio de gestión, ya que se ha demostrado que “ésta ha fracasado y hemos podido comprobar que todos los sectores que se han desarrollado de verdad han sido gracias a la privada como ha ocurrido con la avenida de França, Nou Patraix, Cortes Valencianas o Moreres”.
“Vuelta la pasado”
Por su parte, la portavoz socialista Sandra Gómez ha puesto en valor el trabajo realizado por anterior gobierno municipal con este PAI y ha recordado la situación “judicializada” que encontraron en 2015 “al estar AUMSA demandada por la empresa adjudicataria y que lograron desbloquear al negociar la retirada de la demanda” y resolver un entorno condicionado por “el famoso circuito de F1 que no nos iba a costar ni un euro”.
“Dejaron morir el proyecto del PAI del Grau y lo convirtieron en el trastero de València” ha afeado la dirigente socialista, que con ello ha defendido que a su llegada “desarrollaron un nuevo modelo de ciudad. Habían pasado veinte años desde el concurso de ideas y nosotros lo adaptamos a las necesidades de la ciudad, la agenda 2020, las necesidades de vivienda pública y el uso terciario que pedían las empresa privadas”. “Catalá puso un mojón de carretera nacional donde nosotros poníamos en delta verde”, ha asegurado.
Gómez ha calificado la propuesta del PP y de Catalá sobre el PAI del Grau “de vuelta al pasado, ya que supone retrotraerse 19 años y volver al modelo de Rita Barberá de canales venecianos y la Fórmula 1” y ha criticado que no se haya aportado ni una idea propia “solo han vuelto al pasado, ni nuevo diseño, ni planeamiento, ni un nuevo concurso, solo vuelven a la València antigua de zonas residencias y muros que no unen ni generan barrio”. “La València de Catalá es la de Barberá”, ha concluido.
“Modelo de privatización”
La portavoz de Compromís, Papi Robles, ha ahondado en esta crítica de vuelta al pasado al pedirle al concejal de Urbanismo “que cambie de siglo” y no fundamente su trabajo en “diseños del pasado y sin voluntad de innovación ni de mejora”. Así, Robles ha criticado que apuesten por “una autopista urbana en vez de un delta verde en el año de la Capitalidad Verde Europea” y ha invitado ha “retado” a Giner a consultar al vecindario qué modelo prefieren.
La dirigente valencianista también ha reprochado al gobierno de Catalá que saque pecho de haber dejado el PAI del Grau en manos privadas y ha preguntado por qué se vuelven a modelos de privatización “en los que se les regala a las constructoras ganar dinero cuando esos beneficios los podría obtener el consistorio y revertirlos en la ciudadanía”.
Además, ha regalado al concejal de Urbanismo “una guía de la Generalitat para promocionar la gestión pública del urbanismo como caso de buenas prácticas”. “Se lo recomiendo porque las buenas prácticas del urbanismo de 2024 proponen que la gestión del urbanismo vaya de la mano de las administraciones. Otra cosa es que usted no quiera trabajar con esto”, ha dicho Robles.
Giner sobre las prisas por aprobar este PAI que critica la oposición, ha indicado “no son por las milongas que tiene en su cabeza sino por la necesidad urgente de vivienda que hay en esta ciudad”. Igualmente, ha insistido que pese las críticas d de la oposición “la diferencia consiste en que el equipo de gobierno destina 2.000 metros cuadrados más para suelo residencial para vivienda de protección pública”.
