El Partido Popular del Ayuntamiento de València denuncia que “los actos vandálicos siguen creciendo en la ciudad de Valencia. En un año la quema de contendedores ha crecido pasando de los 261 quemados en 2021 a los 304 registrados en 2022, eso supone un aumento del 17% en un solo año”.
Con ello, también han aumentado los costes para el Ayuntamiento de estos actos vandálicos. “La quema de contendores en dos años ha costado al Ayuntamiento más de 540.00 euros, los costes han sido de 260.700 euros en el año 2021 y 285.600 en el año 2022”, según explican los populares.
“A la quema de contendores se suman las pintadas tanto de monumentos, edificios, puentes históricos… Ciutat Vella se han llenado de pintadas muchas de las paredes de edificios singulares sin que nadie ponga freno a estos actos vandálicos al igual que el que sufren los puentes históricos de la ciudad”, aseguran.
El concejal del PP, Carlos Mundina, ha denunciado que mientras “esto ocurre en nuestra ciudad la ordenanza de convivencia, que, entre otras cosas, también debía velar por combatir los actos vandálicos, sigue sin ser aprobada. El gobierno de Ribó y PSOE lleva gastados más de 130.000 euros en su elaboración que sigue sin validarse”.
Mundina ha señalado que “la situación que se vive en Ciutat Vella con las pintadas en muchas de sus fachadas o los puentes históricos de la ciudad es una muestra de la gestión del gobierno de Ribó y PSOE que tiene una ciudad sucia y abandonada”.
