El portavoz del Ayuntamiento de València y del grupo municipal del PP, Juan Carlos Caballero, ha avanzado que su formación “no apoyará ni aceptará” la propuesta de Vox de retirar el nombre de Guillem Agulló, el joven antifascista asesinado en 1993 por un grupo de neonazis, del paseo de los Jardines de Viveros de la capital del Turia.
“Es una propuesta más que se sustanciará en la Comisión de Cultura, pero una vez estudiada la propuesta el Partido Popular no aceptará y no la respaldará” ha indicado Caballero en declaraciones a los medios tras el pleno extraordinario que se ha celebrado este jueves al ser preguntado por la propeusta de sus sucios de gobierno, Vox, de retirar el nombre a este paseo.
“Nosotros estamos a favor de la convivencia y no del frentismo, por lo cual, esa propuesta se sustanciará en la comisión correspondiente y allí cada grupo emitirá su voto” ha explicado el dirigente ‘popular’ que este anuncio le ha pillado por sorpresa a primera hora de la mañana minutos después del anuncio de Vox.
De hecho, el portavoz de la formación ultraderechista y concejal de Parques y Jardines del Ayuntamiento de València, Juanma Badenas, ha mostrado su intención de retirar este nombre del paseo para buscar “un nombre que corresponda realmente con lo que la mayoría valencianos piensan y sienten”.
“Supone una imposición de una parte de los valencianos, que ahora ya no es la mayoritaria, porque los electores decidieron que quienes fuéramos parte del gobierno de la ciudad de València fuéramos otros partidos que representamos otras ideas, hacia esa parte que ahora es la mayoritaria” ha indicado el portavoz de Vox.
Premio Guillem Agulló
Esta polémica en la política municipal se produce dos días después de que PP y Vox aprobaran en Les Corts retirar el Premio Guillem Agulló -fue aprobado en 2016 a partir de una declaración institucional suscrita por unanimidad- que cada 25 de abril, día de la cámara valenciana, se concede a personas y entidades que lucha contra delitos de odio, en memoria del joven antifascista asesinado en 1993 por un grupo de neonazis en Montanejos.
Ambas formaciones defendieron su retirada alegando que el nombre del reconocimiento fue una “decisión unilateral” del ‘expresident’ del parlamento valenciano Enric Morera. Mientras que la oposición, PSPV y Compromís mostraron su “indignación” por esta decisión y lamentaron que coincidiera con la agresión grupal a un casal antifascista en las fiestas de la Magdalena de Castelló de la Plana.
