El Consejo Rector de la Junta Central Fallera (JCF) ha aprobado este miércoles el presupuesto para 2026, que asciende a 3.749.256 euros, un 1 % más que el año anterior. Según ha explicado el concejal de Fallas, Santiago Ballester, se trata de unas cuentas que “apuestan por la mejora continua de la gestión, la modernización tecnológica y la puesta en valor de nuestras tradiciones, con la mirada puesta en el futuro y sin perder nuestras raíces”.
Entre las principales novedades destacan tres líneas estratégicas: el refuerzo del equipo técnico, la transformación digital y la promoción del patrimonio cultural de las Fallas.
Impulso a la transformación digital
Una de las partidas con mayor incremento es la de informática, que pasa de 65.000 a 100.000 euros, un aumento del 54 % destinado al desarrollo de un nuevo programa informático de gestión integral.
Este proyecto tiene como objetivo renovar la Secretaría Virtual para mejorar la relación con las comisiones falleras, agilizar los trámites y adaptar la gestión interna a los estándares digitales actuales.
Además, se ha aprobado la creación de una nueva plaza de personal informático, lo que eleva el gasto de personal a 479.303 euros, un 8 % más que en 2025.
Diez años de Fallas Patrimonio de la Humanidad
El presupuesto incluye una partida especial de 25.000 euros destinada a la conmemoración del décimo aniversario de la declaración de las Fallas como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO, una cifra que triplica la de 2025.
Según Ballester, “el décimo aniversario de la declaración de la UNESCO debe servir para reforzar nuestro orgullo como valencianos y seguir trabajando juntos para que las Fallas sigan siendo un referente de cultura y participación en todo el mundo”.
Con este aumento se pretende reforzar la difusión del valor cultural y artístico de la fiesta, tanto a nivel local como internacional, y poner en valor su proyección global como símbolo identitario de València.
Mejora en la gestión de los recursos públicos
Finalmente, el Consejo Rector ha aprobado la adhesión de la Junta Central Fallera a la Central de Compras de la Diputación de València, una medida que agilizará los procesos de adquisición de materiales y suministros y permitirá optimizar los recursos públicos.
Con esta integración, la JCF espera mejorar los tiempos de respuesta, reducir costes y hacer más eficiente la gestión de sus servicios administrativos.




