La dana que arrasó gran parte de la provincia de Valencia el pasado 29 de octubre provocó cuantiosos daños materiales y personales (con seis víctimas mortales) en Aldaia. Una de las infraestructuras que resultó más dañada por las inundaciones es la piscina municipal, un espacio que entre junio y septiembre del año pasado recibió a más de 50.000 usuarios.
En declaraciones a EFE, Guillermo Luján, alcalde de Aldaia cuenta cómo todavía resulta «desolador» ver lo afectado que está «un espacio lúdico» como lo es la piscina de la localidad. Cuenta que, aunque tienen el dinero disponible, «el daño en las instalaciones es tan grande que hay que desde cero» y los numerosos trámites burocráticos van a impedir que esté disponible para este verano. «Sería importante poder disfrutar de la piscina lúdica porque también es importante recuperar la normalidad», destacó el primer edil.
La recuperación de las piscinas de verano es común en otras poblaciones afectadas por la dana; en especial, en la zona de l’Horta Sud.