La Generalitat está ubicando ya en centros residenciales para mayores a las personas dependientes cuyas viviendas han resultada afectadas por la emergencia de la DANA que ha asolado la Comunitat Valenciana.
Para ello, la Vicepresidencia y Conselleria de Servicios Sociales, Igualdad y Vivienda ha establecido un protocolo de urgencia para atender las diferentes necesidades de las personas mayores afectadas por la catástrofe.
El protocolo permite que las personas mayores dependientes cuyas viviendas se han visto afectadas puedan ingresar de forma inmediata en una residencia, aunque no cuenten con solicitud previa de ingreso.
Se da así respuesta urgente a la situación de las personas mayores dependientes que no cuentan con recursos familiares o estructuras sociales de apoyo capaces de atender las necesidades de este colectivo especialmente vulnerable.
Para cubrir esta necesidad perentoria, la Vicepresidencia y Conselleria de Servicios Sociales habilitó plazas de residencias públicas desde el primer día de la catástrofe, así como la coordinación con los centros privados para habilitar todas las plazas disponibles.
Hasta el momento, se ha ubicado a 37 mayores dependientes en centros en los que se ha primado plaza pública, pero también se está utilizando recursos privados con cobertura pública, y atendiendo a razones de proximidad de las personas al lugar de residencia de sus familiares.
Entre otros, se han trasladado personas al Centro Residencial SAVIA de Requena; la Residencia de Personas Mayores Dependientes La Cañada de Paterna; Centro Residencial SAVIA de Picassent; Residencia para Personas Dependientes de Silla; Residencia de Mayores Solimar de Sollana; Residencia para Personas Mayores Saleta Conarda de la Pobla de Vallbona; Residencia y Centro de Día de Personas Mayores Dependientes de Moncada y la Residencia de Personas Mayores de Torrent.
La Generalitat actúa a partir de las peticiones de los servicios municipales de los ayuntamientos, que son quienes evalúan en primer lugar la situación de la persona afectada a través de sus equipos de atención primaria e intervención y trasladan la necesidad a las direcciones territoriales de la Conselleria de Servicios Sociales.
Si se trata de personas mayores no dependientes pero también necesitadas de vivienda, se les ofrece un recurso habitacional temporal a través de otras vías, como en alojamientos turísticos, hasta evaluar la situación en la que se encuentran y adaptar el servicio habitacional a sus necesidades en caso de necesitar vivienda más estable.