Según las estimaciones lanzadas por los organizadores, más de 20.000 personas se reunieron en la ciudad de València para participar en la manifestación anual del Orgullo, convirtiéndola en la más masiva de las últimas décadas.
Bajo el lema “Orgull de totes, drets per a totes“, la marcha comenzó a las 19:30 horas en la Alameda de València, con una explosión de fuegos artificiales previa, y siguió la misma ruta del año anterior, recorriendo la calle Colón hasta llegar a la plaza del Ayuntamiento alrededor de las 21:00 horas.
La convocatoria de este año estuvo marcada por el reciente cambio político tras las elecciones del pasado 28 de mayo. Bajo el contexto de la conformación del futuro Consell liderado por Carlos Mazón del Partido Popular, en el cual también participará Vox, se exhibieron mensajes clásicos de libertad y numerosas demandas.
Se pudieron observar pancartas que decían “La ley trans no se toca” y “No dejaremos que nos tiren a la basura“, en referencia a la pancarta colocada por Vox en Madrid, que ha desatado la polémica en los últimos días.
Por su parte, cabe recordar que la recién proclamada alcaldesa de València, María José Catalá, del Partido Popular, decidió mantener una pancarta arcoíris en la fachada del Ayuntamiento e iluminar el Consistorio durante la noche, con los colores temáticos.
La jornada, en la que participaron alrededor de 70 asociaciones y 16 vehículos para el desfile, transcurrió en un ambiente de reivindicación y fiesta, con los ya tradicionales bailes y batucadas por parte de los asistentes.
