El consenso interno dentro del Partido Popular de la Comunitat Valenciana empieza a tomar forma en torno a Vicente Mompó. Él es el actual presidente de la Diputación de Valencia y se perfila como el relevo natural de Carlos Mazón tras la crisis política derivada de la gestión de la DANA del 29 de octubre.
Los principales dirigentes provinciales —Toni Pérez en Alicante, Marta Barrachina en Castellón y el propio Mompó en Valencia—, junto al secretario general Juanfran Pérez Llorca, han intensificado los contactos. Esto tiene el objetivo de acordar una salida pactada que evite fracturas internas. En estas conversaciones, el nombre de Mompó ha ganado peso como una opción “de consenso y estabilidad” para encabezar la nueva etapa del PP valenciano.
Un relevo ordenado para evitar una crisis interna
El desgaste político de Mazón, acentuado por las críticas a la coordinación institucional durante la DANA, ha acelerado los movimientos en el partido. Según fuentes de la dirección regional, la intención es reconstruir la confianza del electorado y preservar la unidad. Esta unidad debe girar en torno a una figura solvente, con experiencia y arraigo territorial.
En ese contexto, Vicente Mompó emerge como la alternativa mejor valorada tanto por su gestión al frente de la Diputación como por su tono moderado. “Queremos que Génova escuche a la Comunitat Valenciana y tenga en cuenta lo que aquí se propone”, señalan dirigentes populares implicados en el proceso.
La dirección autonómica estudia varias fórmulas para consolidar este relevo. Una posibilidad sería la incorporación de Mompó al Consell en la próxima remodelación prevista, lo que lo situaría como candidato natural para 2027. Otra opción es su designación como líder regional del partido en los próximos meses, reforzando su visibilidad antes del próximo ciclo electoral.
Aunque la decisión final corresponde a Alberto Núñez Feijóo, fuentes próximas a Génova confirman que el presidente nacional observa con buenos ojos el ascenso de Mompó. Él es valorado por su perfil conciliador y su habilidad para integrar distintas sensibilidades dentro del partido.
Un dirigente cercano, dialogante y de gestión eficaz
Vicente Mompó, natural de Gavarda, ha construido su carrera política desde el ámbito local. Allí fue alcalde antes de asumir la presidencia de la Diputación de Valencia. Su trayectoria está marcada por un estilo pragmático y una fuerte conexión con el territorio.
Desde su llegada a la Diputación, ha logrado mantener la estabilidad institucional en un gobierno compartido con Ens Uneix y Vox. Este es un equilibrio poco habitual en la política valenciana. Este modelo de gestión, basado en el diálogo y la cooperación, ha reforzado su imagen de líder sereno y eficaz.
Durante la crisis de la DANA, Mompó coordinó personalmente la respuesta de la institución provincial. Él priorizó la atención a los municipios afectados y la colaboración entre administraciones. Su capacidad de reacción y su presencia constante sobre el terreno consolidaron su reputación como gestor fiable y cercano.
Valencianismo moderado y proyección autonómica
Mompó se define como un valencianista moderado, defensor de la identidad, la cultura y la lengua propias de la Comunitat Valenciana. Esto dentro de un marco de cooperación con el conjunto de España. Esta visión abierta y conciliadora le ha permitido conectar con diferentes sensibilidades del electorado. Además, ha ganado respeto incluso fuera de su partido.
Su proyección ya trasciende el ámbito provincial. En Madrid, es visto como un dirigente con proyección autonómica y capacidad para renovar el mensaje del PP valenciano sin romper con su base tradicional. En el entorno de los barones provinciales, se le considera “el rostro de la nueva etapa”: un político de gestión, no de confrontación.
Con el apoyo unánime de los líderes provinciales y una valoración positiva por parte de la dirección nacional, Vicente Mompó se consolida como el referente. Él puede unir al PP valenciano y liderar su renovación desde la moderación y la eficacia.
