El Ayuntamiento de València ha celebrado este viernes su pleno de organización, el primero tras elecciones del 28 de mayo. Una sesión en la que la oposición ha reprochado a la alcaldesa, Maria José Catalá, las retribuciones asignadas a Vox, la reducción del número de comisiones, la salida de los despachos de Compromís y el PSPV-PSOE de la casa consistorial o el día de celebración de los plenos, que a partir de ahora pasarán a ser los martes.
Además, Vox, los “socios preferentes” de la alcaldesa, le han avisado de que necesitará sus cuatro concejales para gestionar y gobernar la capital del Turia y que está vez iban a votar a favor “por responsabilidad política y para favorecer la buena gestión del Ayuntamiento”. De hecho, el portavoz de la ultraderecha, Juanma Badenas, ha recordado a la dirigente popular que “los números también son tozudos” y que tiene 13 concejales aunque “parece que actúa como si tuviese 17 concejales sin restarle 4”.
“Si usted no quiere que en un pleno, en una comisión o en un consejo administración, se produzca un choque, lo mejor es que es que se produzca una suma aritmética que evite este tipo de situaciones” ha asegurado el dirigente ultraderechista, que también ha pedido a la alcaldesa que tenga “muy en cuenta” lo que le pasó a James Dean “que se chocó por vivir al límite”: “Vivir al límite puede ser emocionante, pero también puede ser peligroso” ha manifestado el concejal.
Así pues, le ha animado a “buscar alianzas convenientes” para que se produzca un “gobierno estable y eficiente”. Por ello Badenas le ha vuelto a tender la mano a Catalá para formar un gobierno de coalición en el Ayuntamiento de València: “Nuestra mano está tendida y usted dice que somos el socio preferente, pero eso implica que hay otros socios que no son preferentes, así que tendrá que elegir” ha afirmado el concejal de Vox.
Compromís denuncia la “mordaza” del gobierno
Por su parte, Compromís ha denunciado la reducción del número de comisiones que asegura “supone un recorte de un tercio de la capacidad de control de la oposición sobre el gobierno”; que los despachos de los grupos de la oposición, a excepción de Vox, estén fuera de la casa consistorial; que en este mes de julio no se haya realizado un pleno ordinario; y la adjudicación de exclusividad a los concejales de Vox, que han tildado como “socios de prepago con condiciones preferentes a los que les están comprando su silencio“.
En este sentido, han realizado una acción protesta antes de comenzar el pleno y los nueve concejales y concejalas de la formación valencianista han llegado con una mordaza azul en la boca para denunciar el “trato que está dando el PP a la oposición”. “Queremos empezar denunciado la falta de condiciones para hacer oposición en este ayuntamiento y la restricción de libertades que está imponiéndonos el Partido Popular al grupo Compromís” ha explicado el portavoz de los valencianistas, Joan Ribó.
Igualmente, Ribó ha indicado que “pensábamos que todo el retraso en convocar el Pleno de organización era para esconder un pacto con Vox hasta después del 23 de julio. Pero al Pleno va el mismo documento de tenencias de alcaldía que conocíamos, teóricamente, con carácter de provisionalidad, lo que muestra que Catalá ha organizado un ayuntamiento de “pueblo grande”, que no está a la altura de València”. “El PP solo ha sido ágil en la ascensión de la Virgen de los Desamparados al primer piso porque el resto de lo que anuncian ya se lo dejamos hecho nosotros” ha ironizado.
Papi Robles, la portavoz adjunta de Compromís, también ha criticado a la alcaldesa por tener una “dedicación exclusiva” y ser “alcaldesa a tiempo parcial”. “Es la primera que debería tener sueldo parcial porque entre ser Secretaria General del PP, diputada en Les Corts, se dedica a ser alcaldesa de València si le queda tiempo” ha asegurado la dirigente valencianista, que también ha afirmado que “este Ayuntamiento se le queda pequeño para sus aspiraciones, pero València demasiado grande”.
“Concejales zombis de Vox”
El portavoz adjunto del PSPV, Borja Sanjuán, ha lamentado que Catalá haya dado entrada “a los concejales zombis de Vox” y ha calificado este pleno como el “más vergonzoso de la historia” porque “vamos a pagar a cuatro personas como si trabajaran por no hacer nada y se va a eliminar lo que nos hace mejores en el organigrama de gobierno”.
“En este nuevo gobierno municipal, las cosas van de sueldos, despachos y sillones. A partir de ahora se va a cobrar como si se trabajar y a ese no trabajar le vamos a llamar hacerse un socio preferente. Esto es lo que ha hecho Vox ha decidido que va a formar parte del gobierno pero sin trabajar” ha señalado el dirigente socialista, que además, ha acusado al PP de “no entender la tarea de la oposición y la democracia” por expulsarles del Ayuntamiento.
Además, ha afirmado que “cuando una persona no está a la altura de la institución demuestra que no está a la altura del cargo, y hemos tardado solamente un mes y medio en comprobar que Catalá no lo está”. En este sentido ha manifestado que “esperaba” que “al menos hubiera tenido 100 días de decoro, pero al final sus ganas de intentar engañar a la ciudad de València, intentando ocultar lo que al final ha ocurrido, que ha pactado el Gobierno con Vox, han llevado a que lleguemos al pleno de organización más vergonzante de la historia del Ayuntamiento de Valencia”.
El PP lamenta la gestión del anterior gobierno
Por su parte, el portavoz del Partido Popular, Juan Carlos Caballero, ha defendido las retribuciones asignadas a los concejales de Vox al ser las mismas que reciben los concejales de Compromís y el PSPV con dedicación exclusiva. Además, ha puesto en valor que el gobierno de Catalá “ha decidido mantener los sueldos y no aumentarlos, como sí ha hecho el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni”.
Asimismo, ha recordado que la reducción del número de comisiones o las preguntas en las mismas es una decisión tomada por el anterior gobierno municipal que ahora está en la oposición. “Este reglamento fue aprobado por el anterior equipo de gobierno, que es el que vinculó el número de preguntas al número de comisiones” ha detallado Caballero, que también ha remarcado que este “nuevo gobierno municipal lo que ha hecho es conformar un gobierno ágil y alejado del ruido y la confrontación“.
Ante las críticas por tener “paralizado” el Ayuntamiento dos meses, el portavoz ‘popular’ ha indicado que “este ayuntamiento ha trabajado en un mes más que ustedes en ocho años porque hemos puesto en marcha la ciudad después de ocho años de parálisis” y ha puesto como ejemplo el plan de choque de limpieza o acabar con “la indignidad” de las colas del padrón. Así pues, ha pedido a la oposición que “respete la democracia y el gobierno de esta ciudad porque los ciudadanos los han echado de este ayuntamiento”.
Por último, la concejala de Hacienda, María José Ferrer San Segundo, ha criticado que los “pufos” sin pagar que deja el anterior gobierno municipal: “Nos ha dejado una herencia envenenada y en cinco meses se ha fundido el presupuesto de Fiestas de València de todo el año“.
