La Generalitat ha instado a la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) a que aporte el agua suficiente para garantizar los aportes necesarios a L’Albufera, tal y como establece el Plan Hidrológico del Júcar.
Los técnicos de la Conselleria de Medio Ambiente, Agua, Infraestructuras y Territorio han trasladado esta pertición en una reunión con responsables de la CHJ para abodar la situación de los niveles de agua y las consecuencias que estos niveles tienen para el ecosistema.
En el encuentro de trabajo, los representantes de la Conselleria de Medio Ambiente han puesto de manifiesto que, debido a la sequía, tanto el nivel del agua del lago como su calidad se ha visto seriamente comprometida por el crecimiento masivo de algas debido, sobre todo, a la falta de flujo que se produce de octubre a mayo cuando las compuertas están cerradas y los nuevos aportes dependen de las lluvias de otoño e invierno, así como de la Perellonà.
La Conselleria de Medio Ambiente está llevando a cabo una vigilancia continuada tanto de la extensión de la inundación invernal como de la calidad del agua y, en especial, la posible aparición de anoxias que causaran mortandades de animales y plantas.
Por todo ello, la Generalitat confía en que la colaboración de la Confederación Hidrográfica del Júcar hará posible el aporte el agua que L’Albufera necesita para su inundación invernal que configura el momento de máximo esplendor del humedal y que es beneficiosa no solo para el medio natural, sino además para evitar la salinización de los marjales y la mejora de los suelos, lo cual también es vital para el cultivo del arroz.
Mañana se celebrará un nuevo encuentro en el que también se ha convocado a los regantes y al que asistirá el director general de Medio Natural, Raúl Mérida.
El Ayuntamiento reclama al Gobierno que ‘ordene’ el aporte hídrico necesario a la Albufera
El Ayuntamiento de València ha trasladado este lunes a la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) la extrema necesidad de realizar a la Albufera aportes hídricos contemplados en el Plan Hidrológico, ante el preocupante estado del lago de l’Albufera.
La reunión técnica celebrada a tres bandas con la asistencia también de la Conselleria de Medio Ambiente ha servido para instar a la CHJ “que los aportes son en la actualidad de extrema necesidad” debido a que las compuertas se mantienen cerradas desde hace dos meses, se está incumpliendo la orden de niveles de la laguna, y se continúa experimentando el fenómeno de crecimiento de microorganismos en la laguna que la han teñido de marrón.
Durante las últimas semanas se ha producido el aporte de 9 Hm3 desde la Acequia Real del Júcar, con la coordinación del Ayuntamiento de Valencia y la Generalitat Valenciana.
Esta aportación, sobre un total de 14,5 Hm3 disponibles de este ámbito, ha permitido circular el agua y recuperar el color habitual en el sector sur del humedal, especialmente en los canales y acequias de drenaje que conducen a las golas del Perellonet y Perelló.
Sin embargo, ante la necesidad de que el agua circule en todo el ámbito del lago y se mejoren las condiciones ecológicas de ésta mediante un lavado completo del sistema se ha solicitado la derivación de los caudales ecológicos recogidos en el Plan de cuenca, que corresponden a 10 Hm3 desde el Turia y 10 Hm3 desde el Júcar.
En este sentido, la Confederación ha reconocido que no tiene posibilidad en este momento de aportar dichos caudales del Turia y Júcar, a pesar de estar comprometidos en el propio plan de cuenca, y ha indicado al Ayuntamiento de València y a la Generalitat Valenciana que se use como aporte el resto de caudal procedente de la Acequia Real del Júcar que asciende a 6,5 Hm3 (resultado de 14,5 menos 9 ya aportados).
Dicho caudal había sido inicialmente reservado para el período de marzo a mayo, para tratar de favorecer la recuperación de praderas de plantas sumergidas y la transparencia del agua, tal y como ocurrió en 2022.
Además, el Ayuntamiento y la Conselleria han solicitado a la Confederación que revise y, en su caso, comunique los posibles nuevos sectores de la modernización de la Acequia Real del Júcar que están ya operativos, con objeto de que se materialicen los caudales ambientales, sujetos a dicha modernización, tal y como queda recogido en el Plan de cuenca.
Por último, el presidente de la Confederación Hidrográfica del Júcar ha indicado que podría tener capacidad de destinar agua a l’Albufera si la ministra competente en medio ambiente así lo manda.
De acuerdo con el concejal de Devesa-Albufera, José Gosálbez, “la situación de la Albufera es preocupante. La falta de lluvias y la falta de aportación de agua por parte de la Confederación y la inundación de los campos del arroz han hecho mella en el nivel de agua de la Albufera. Desde el Ayuntamiento se ha cumplido escrupulosamente con todas nuestras obligaciones: hemos controlado el nivel, hemos alertado de la falta de agua a la Generalitat y a la Confederación y hemos cerrado las compuertas para que evitar que el agua se escape al mar”.
Gosálbez añade que “todo es una cuestión política, Teresa Ribera, la ministra competente, puede y debe ordenar que se envíe agua a la Albufera en este momento tan tremendamente complicado para el lago. No hacerlo es dejar la Albufera a los pies de los caballos y sin agua”.
Contexto
Tradicionalmente la inundación invernal, localmente conocida como perellonà y con grandes beneficios ambientales y agronómicos, se realiza por gravedad desde el lago de l’Albufera, suponiendo un vaciado del vaso que era compensado por aportes invernales y lluvia.
Sin embargo, en un año con excesivo calor, sin lluvias y falta de aportes, se han desencadenado diversos fenómenos que han causado un impacto sobre el ecosistema acuático, especialmente en relación a los bajos niveles y la ocurrencia de un crecimiento de algas microscópicas no ocurrido antes, y que ha teñido de color marrón el agua del lago.
Ya en septiembre, ante la previsible bajada del nivel de del lago para la perellonà y la falta de pronóstico de lluvias, el Ayuntamiento de València ha mantenido las compuertas de las golas cerradas para evitar la salida de agua del lago.
Esto ha permitido evitar un grave impacto sobre del lago y los usos económicos como la pesca o el turismo que hubiera causado, por ejemplo, un secado mucho más drástico o la salinización del sistema.
Asimismo, desde el Ayuntamiento de València se solicitó formalmente a la Confederación Hidrológica del Júcar la derivación urgente de los caudales ecológicos recogidos en el Plan Hidrológico.
