La Diputació de València ha prorrogado un año los plazos del Plan de Inversiones 2022-23, aprobado por el anterior equipo de gobierno, para facilitar a los ayuntamientos la finalización de las obras aprobadas, cuyo nivel de ejecución no alcanza el 10%.
La prórroga se aprobará en el pleno de este mes, a propuesta de la vicepresidenta primera y actual responsable de Cooperación, Natàlia Enguix, quien explica que “el principal problema fue el retraso de seis meses en la aprobación de los proyectos por parte del anterior gobierno provincial”. “En respuesta a este problema que nos trasladan los alcaldes, vamos a facilitarles el proceso para que el dinero se quede en los municipios”, añade Enguix.
Las cifras del Plan de Inversiones 2022-23 justifican la decisión del nuevo gobierno provincial, encabezado por Vicent Mompó, de ampliar los plazos para tratar de ayudar a los alcaldes y alcaldesas a llevar adelante los proyectos originales, o actuaciones alternativas en caso de que la obra inicial no pueda llevarse a término. No fue hasta el 20 de septiembre de 2022, cuando el pleno de la Diputación dio luz verde a 1.500 proyectos presentados por los municipios, lo que ha llevado a que apenas se hayan ejecutado un 9,63% y hay un 71% de obras sin adjudicar.
En este sentido, la vicepresidenta Natàlia Enguix explica que “hemos tenido en cuenta los retrasos en la aprobación de los proyectos y las dificultades de los ayuntamientos para concretar las inversiones en los plazos previstos”. En respuesta a las solicitudes de los consistorios, la Diputación amplía del 28 de junio de 2024 al 19 de mayo de 2025 el plazo para finalizar las obras del Plan de Inversiones 2022-23, y del 30 de septiembre de este año al 6 de octubre de 2025 la fecha límite para justificar las actuaciones ejecutadas.
Natàlia Enguix insiste en que la prioridad es “ayudar a los alcaldes y alcaldesas a ejecutar los proyectos que presentan y que el dinero que reciben de la Diputación se quede en los municipios y no tengan que renunciar a las subvenciones”. Para ello, y teniendo en cuenta que hay 100 millones de euros sin ejecutar de los 140 millones asignados en el anterior plan de inversiones, “ofrecemos soluciones a los ayuntamientos no solo ampliando los plazos, sino autorizando cambios de proyectos que ahora resulten inviables, siempre pensando en que el dinero asignado a cada municipio se traduzca en mejoras reales para sus habitantes”.
Pla Obert d’Inversions
Los problemas detectados en los anteriores planes de inversión “se han tenido muy en cuenta a la hora de aprobar el nuevo Pla Obert, un programa cuatrienal que no solo recoge el mayor esfuerzo inversor en la historia de la Diputación, sino que ofrece a los ayuntamientos todo tipo de facilidades para planificar sus necesidades y presentarlas en cualquier momento, contribuyendo a que no se precipiten a la hora de decidir las obras y sobre todo a ejecutarlas de la manera más ágil posible una vez estén aprobadas”.
El nuevo Pla Obert d’Inversions de la Diputació de València tiene una dotación global de 350 millones de euros, 340 millones para municipios y otros 10 para las mancomunidades, y contará con tres convocatorias anuales de aprobación de proyectos.
El programa mantiene la autonomía de alcaldes y alcaldesas a la hora de decidir las actuaciones que necesitan sus municipios, al tiempo que incentivará las mejoras en las redes de agua potable, las iniciativas de urbanismo con perspectiva de género y, en general, todos los proyectos innovadores y arriesgados que transformen las comarcas valencianas. Los mejores proyectos, desde el punto de vista de las buenas prácticas, serán reconocidos anualmente por la Diputación.
